Uno por uno: Tiago y Gabi dominan, Godín se complica
El inocente penalti de Godín complicó un partido que estuvo controlado durante la mayor parte gracias a un centro del campo atlético.
Oblak. Durante el juego fue muy poco exigido por los atacantes del Valencia. Tuvo una acertada intervención en la primera parte cuando desbarató un pase de la muerte de Cancelo. En el penalti no aguantó a Alcácer y se venció a su izquierda.
Juanfran. Correcto e inteligente a la hora de desdoblarse. Primero se entendió bien con un jugador vertical como Carrasco y después con otro más posicional como Koke. En defensa no pasó por excesivos problemas, mandó en su perfil.
Giménez. Solvente aunque sin la anticipación de otros días. Sólido y bien colocado. La salida de Alcácer le exigía más y entre él y Godín le sujetaron bastante bien.
Godín. Fue el dueño del espacio aéreo, en las dos áreas. Hasta dos veces pudo marcar en sendos remates de cabeza, uno casi involuntario. Pero estuvo inocente en el penalti atropellando a un Mustafi que estaba de espaldas a la portería y tuvo otro error casi al final que Oblak solucionó.
Filipe. Estuvo correcto, quizá con poco protagonismo en ataque. Tuvo que medir mucho porque Simeone decidió cambiar y le puso a Carrasco por delante. Pese a todo Cancelo sólo le sorprendió una vez en todo el partido.
Carrasco. Muy activo y desequilibrante en su inicio por el costado derecho. Estuvo ahí aplicado también tácticamente, sin descubrir a Juanfran y entendiéndose muy bien con él. Después pasó a la izquierda y se le vio más cómodo si cabe. Dibujó una diagonal, marca de la casa, que terminó con un derechazo bien angulado para hacer el segundo de los colchoneros. Un lunar, a veces pasado de revoluciones. El estadio le despidió en pie.
Gabi. Se apoderó de la zona central. Los centrocampistas che no encontraban la manera de superar al doble pivote colchonero en la primera parte. Muy atento a las líneas de pase valencianistas y con el acierto necesario para sacar el primer pase bien jugado.
Tiago. Partido muy completo el suyo, al Valencia le costaba mucho superar la línea medular colchonera donde el portugués se mostró muy sólido junto a Gabi. Con balón siempre estuvo limpio, e incluso acertó en uno de esos balones largos suyos que casi aprovecha Juanfran. Se mantuvo siempre atento al apoyo en corto y sin errores en la entrega.
Koke. Se asoció muy bien por la izquierda en el primer tiempo con Jackson, Filipe y Griezmann. Y tuvo el suficiente recorrido como para plantarse, tras una pared, ante Jaume Domenech, pero le faltó definir. Después, por la derecha, encontró un buen socio también en Juanfran. En defensa fue otro de los jugadores más sólidos del equipo, recuperando muchos balones.
Griezmann. Inteligente en los desmarques y, sobre todo, con mucha visión para combinar e incluso para asistir a Jackson. El colombiano malogró un gran servicio del francés nada más marcar el primero.
Jackson. Peleón y abrió la lata gracias al doble regalo de Mustafi. Dibujó una buena pared con Koke y volvió a fajarse para el equipo. Tuvo otra gran ocasión en la que no acierto y en la segunda aparte casi marca al desviar una tiro de Koke. Se marchó aplaudido por su entrega.
Fernando Torres. Saltó a la hora de partido y tuvo una buena ocasión para marcar de cabeza, pero su remate se marchó por poco. Voluntarioso, pero poco más.
Óliver. Sustituyó a Carrasco con el objetivo de enfriar el partido. El Atlético hilvanó menos juego e intentó ofrecerse para tener más la pelota.
Correa. Salió en los minutos finales y todavía le dio tiempo para poder emplearse un uno de sus eslaloms. Los jugadores valencianistas no dudaron a la hora de emplearse con él con contundencia.