REAL ZARAGOZA
Bono echa el candado
El Real Zaragoza ya es el segundo equipo menos goleado de Segunda División y el guardameta marroquí encadena tres partidos dejando su portería a cero.
Ranko Popovic se decidió por Bono como portero titular del Real Zaragoza y el marroquí le respondió con su tercer partido consecutivo sin encajar un gol, una serie que ha llevado al equipo aragonés a ser el segundo menos goleado de la categoría, sólo por detrás del Osasuna. El Zaragoza ha encajado siete goles en estas nueve primeras jornadas, mientras que el líder de Segunda División ha recibido uno menos.
El dato es revelador de la remontada del Zaragoza en la clasificación —ha pasado en cuarto jornadas de la 18ª a la tercera posición—, y supera al de las dos últimas temporadas en la categoría. El equipo llevaba diez goles en contra a estas alturas del curso pasado, mientras que hace dos campañas, con Paco Herrera todavía en banquillo, el Zaragoza había recibido nueve goles en las nueve primeras jornadas del campeonato.
Hasta el partido frente al Tenerife, Popovic no se había visto obligado a mostrar su orden de preferencias en la portería, porque o Manu Herrera estaba lesionado o Bono se encontraba concentrado con su selección nacional, pero con los dos guardametas en condiciones, el técnico serbio se decantó por el marroquí, que ha sido titular en siete encuentros, por sólo dos de Manu Herrera, que también jugó en la eliminatoria de Copa frente al Llagostera.
Bono ha encajado cinco tantos y Manu Herrera, dos, el último en el Carlos Belmonte y en el descuento, en una acción que le dolió especialmente al portero madrileño, consciente de que los pequeños detalles pueden decidir la pugna, por el momento muy sana, en la portería del Real Zaragoza.
Desde el cambio de sistema en el Ángel Carro de Lugo, el Real Zaragoza se ha convertido en un equipo bastante mejor ordenado, al que apenas le crean ocasiones de gol. Entre el Lugo, el Alavés, el Albacete y el Tenerife sólo han podido marcarle un tanto —el apuntado en el descuento de Albacete—, y el equipo aragonés ha podido rentabilizar al máximo sus goles, pese a que, sobre papel, la plantilla haya perdido potencial realizador respecto del curso pasado.
La clave para ascender es recibir pocos goles y el Zaragoza está en el camino de cimentar ahí su vuelta a Primera.