Jonás Gutiérrez: "Ahora disfruto de todo, hasta entrenando"
Todavía no ha debutado, pero la vida le ha ensañado a esperar con paciencia y ambición su momento. Le ilusiona el proyecto del Deportivo y le augura un gran futuro a su compatriota Fede Cartabia.
—Lleva casi un mes aquí. ¿Cómo valora su adaptación?
—Estoy muy contento, sobre todo porque se están dando resultados importantes y me han comentado todo lo que pasaron la temporada anterior. Si las cosas van bien es más fácil la dinámica de grupo.
—¿Espera estar ya por lo menos en el banquillo?
—Creo que las cosas se dan cuando se tienen que dar. Corro con la desventaja de llegar el último y que el equipo está a muy buen nivel. Mi experiencia me dice que hay que estar preparado, nunca sabes cuando se hará un hueco. Además, tengo mi experiencia personal del año pasado. Tuve que pasar por una quimioterapia, un tratamiento agresivo. No se sabía si iba a volver a jugar, a qué nivel... y terminé jugando los últimos nueve partidos, ocho de titular. Estoy muy tranquilo, no tengo apuros ni ansiedad.
—Pero como se dice, estará deseando morder hierba...
—Claro, por mi situación en los dos últimos años toqué poca hierba. Por todo eso hoy disfruto mucho de todo, hasta entrenando. Lo importante es no venirse abajo y estar preparado.
—¿Llegó a pensar que se había acabado el fútbol cuando le diagnosticaron el cáncer?
—Desde el principio del tratamiento los médicos me dijeron que no tendría problemas en volver, pero uno no sabía si lo decían para ser positivos. Yo me centré en mi recuperación y nada más salí del hospital empecé a entrenar. Un día corría un minuto, luego dos... Al tener el alta, ya pensé en volver a jugar.
—Vuelve a España tras siete años. ¿Ve la Liga muy cambiada?
—Lo distinto ahora es que hay dos o tres equipos que marcan muchas diferencias, aunque este año parece más parejo. Se han separado Real Madrid, Barcelona y Atlético, aunque parece que no se descuelgan tanto.
—¿Es una Liga polarizada por Cristiano y Messi?
—Los números que marcan son difíciles de igualar, de acercarse o incluso de imaginarse. Los dos están marcando una época.
—¿Qué le parece lo que pasa con Messi en Argentina?
—Es injusto, las críticas son exageradas y no las merece. No hay jugador con sus registros. Argentina hace muchos años que no llegaba a finales y con Leo se ha logrado en el Mundial y la Copa América. Tenemos la suerte de que Messi es argentino.
—Aquí tiene dos compatriotas, Lux y Fede. ¿Ayuda?
—A Poroto ya lo conocía del Mallorca. Es un gran chico y me ha hecho las cosas más fáciles. A Fede no lo conocía, pero tiene unas condiciones increíbles y tiene una gran futuro por delante.
—En el Mallorca vivió una buena etapa en un modesto. ¿Lo puede hacer este Depor?
—Yo pienso en el día a día, en el paso a paso. Se arrancó bien pero no se puede quemar etapas pensando ya en Europa. El primer objetivo es la permanencia. Si se logra en buenas fechas, se podrá hablar de escalar. Eso sí, el grupo está confiando que se va por el buen camino.
—Llega de Inglaterra. ¿Cambia la forma de trabajar?
—Cada míster tiene su forma de filosofar. Pero sí, aquí se hacen entrenamientos mucho más tácticos, se usa más el vídeo... Pienso que sobre todo uno tiene que creer en sus métodos y lo que hace, más allá de los resultados.
—¿Qué jugador del Depor le está sorprendiendo más?
—Tengo mucha fe en Fede. Le veo cosas distintas como futbolistas. Va a estar en él y en no precipitarse, es joven. No tiene que desesperarse porque tiene potencial para llegar lejos.
—¿Le hace ilusión jugar algún partido en concreto?
—No, tuve la suerte de jugar en todos los grandes campos en mi anterior etapa en España. Me hubiese gustado ir a jugar a Mallorca por los tres años que estuve allí. Hubiese sido bonito, tengo muy buenos recuerdos.