“Será complicado puntuar, pero todo es posible en ‘Graná’...”
AS estuvo en la peña nazarí de Madrid, inaugurada el año pasado para seguir los partidos que el Granada juega en la capital, “y alguno más por el norte”, añade el presidente.
Una amplia foto de la Alhambra y varias bufandas decoran las paredes de La Pequeña Graná, un bar del sur de Madrid, concretamente del 124 de la calle Embajadores, que sirve como punto de encuentro habitual (el otro es el Coslada Tapas) de los miembros de la Peña Granadinista de Madrid, inaugurada el año pasado para seguir formalmente los encuentros que el Granada juega en la capital de España, “y alguno más por el norte”, añade Jaime Esteban, el presidente.
Son casi cien peñistas “y creciendo poco a poco. Hay muchos granadinos desplazados en Madrid, casi todos por motivos de trabajo, y estamos unidos por el Granada”. Muchos de ellos apenas se conocían entre sí, pero de las tardes de agonía y gloria ha surgido una relación de amistad que hace grande esta peña. “Estar fuera de casa nos une más; hemos vivido días tristes y otros inolvidables”, dice Emilio Abril, otro de los peñistas, refiriéndose a la victoria en Anoeta por 0-3 que disfrutaron en el estadio el año pasado. Sobre el partido de esta tarde, muchos coinciden. “Es el más difícil. Ante el Madrid es muy complicado puntuar ni aún teniendo el día de cara”, dice Antonio Ruiz, que rápidamente es replicado por Mónica Reina: “Todo es posible en Graná”.
La Peña Granadinista de Madrid será la anfitriona de los casi mil aficionados que acuden al encuentro. Tienen previsto recibir a los seguidores y empezar la tarde cerca del Museo del Jamón, a unos doscientos metros del estadio, para después todos juntos jalear al equipo en su llegada al Bernabéu. Luego, en la grada, todos se fundirán en un punto rojo y blanco, como una sola voz, en una esquina del Cuarto Anfiteatro donde latirá con fuerza el corazón de Granada.