Una manita para empezar en el estreno liguero del Castilla

El Real Madrid Castilla ganó de manera contundente al Ebro 5-1 en su primer partido liguero. En el primer once de Zidane hubo dos novedades, Odegaard y Borja Mayoral fueron titulares. Los dos jugadores no disputaron ningún minuto de la pretemporada castillista y ayer fueron dos piezas claves en la victoria. Sobre todo el internacional español que anotó un doblete. Mientras, el noruego ocupó el puesto de mediapunta y se intercambió con Enzo Zidane, teniendo los dos libertad de movimientos por todo el terreno de juego. Los cambios de posición despistaron al rival, que antes de llegar al minuto diez ya perdía 1-0. El tanto llegó en una falta botada por Fran, que se vistió de Cristiano y sorprendió al rival con un golpeo seco y fuerte en el lanzamiento de la falta. El lateral buscó el lado de Montoya, que erró al dar un paso hacia su izquierda, permitiendo que el balón entrase en su portería.

El Ebro aprovechó muy bien la única oportunidad de la que dispuso: una jugada personal por banda de Lacruz, que centró el balón al segundo palo, donde Edu García igualó el partido. El extremo pasó a la historia del conjunto aragonés al ser el autor del primer gol del equipo en Segunda B. Pese a lograr el empate, al Ebro le pasó factura la expulsión de Maureta. Cédres hizo una genialidad, elevando el balón por encima del portero y cuando el Di Stéfano ya cantaba gol, Maureta detuvo el balón con la mano. El colegiado, Gil Coscolla, sacó sin dudar la roja y pitó penalti. Montoya detuvo en primera instancia el tiro de Borja Mayoral, pero Enzo Zidane, el más listo de todos, ganó el rechace y puso por delante a los suyos.

Acto seguido llegó el recital de Borja Mayoral. Quizá espoleado por el fallo en el penalti, se quitó la espina con un doblete. Zidane puede estar satisfecho por contar en su plantilla con un 9 como lo es internacional e iguala el registro de la temporada pasada de Markkannen. La gran apuesta del técnico francés rescindió su contrato con el Madrid, justo un año después de su fichaje.

La segunda parte fue un calco de la primera: control de los cachorros blancos con más llegadas al área de Montoya. Eso sí, el partido dejó claro que el equipo tiene gol, hasta cuatro jugadores anotaron. Además el marcador igualó el mejor resultado de Zidane como entrenador del Real Madrid Castilla. El 29 de