Borja Lázaro acepta el reto de Guillermo: “Me veo titular”
El madrileño piropea al ex del Athletic, pero se dice dispuesto a competir por un puesto. “Regresar a Almería no será especial”, analiza en su vuelta al Juegos del Mediterráneo.
Borja Lázaro regresa a Almería. Dice que no representa un retorno especial. Que el próximo domingo, en el debut en Liga, celebrará un gol en caso de ver puerta en Los Juegos del Mediterráneo. Que aquel fugaz paso por el filial rojiblanco, desde enero hasta junio de 2014, supuso sólo un escalón más de su carrera. “Conseguimos el objetivo de la permanencia. Tenía dos años más con el primer equipo, pero no contaron conmigo. No tengo ningún tipo de afecto. Respeto sí, pero ya está”, comenta en sala de prensa en la previa de un duelo que para él será más importante por lo que representa de reto, uno más, desde que aterrizó en Butarque hace justo un año.
Borja sabe que lo tendrá difícil para jugar. La cesión de Guillermo por parte del Athletic le cierra, a priori, las puertas de la titularidad. El cachorro de los bilbaínos ha llegado a Madrid para ser indiscutible. Garitano no lo niega. No quiso ningún otro delantero en el mercado estival porque lo esperaba a él, a Guillermo. Y eso que el Athletic aún lo podría repescar en 2015. Poco importa. El nuevo ariete pepinero será el sustituto de Chuli en la delantera. Será su nuevo e intocable hombre gol.
El onubense, como Guillermo, fichó por el Lega a principios de 2014 para hacer sombra a nuestro protagonista. Su racha de cara a puerta y su estilo de juego, rápido y pillo entre líneas, apartó a Borja de los planes blanquiazules. Desde su última presencia en el once, en enero, ante el Alavés, apenas compareció en las alineaciones. Pero Borja no se rindió y lejos de pedir su salida de Butarque, decidió continuar también esta temporada. Oportunidades de salir no le han faltado.
El Cádiz llamó con fuerza a sus puertas a principios de verano. La oferta económica era desorbitada, pero Borja dijo no. Su respuesta fue un reto personal y profesional. Quiere demostrar que vale para triunfar en Segunda. Que sus buenos números el curso pasado (logró un gol cada 171 minutos frente al gol cada 148 minutos de Chuli) no fueron casualidad. Que está dispuesto a superar la competencia de Guillermo como ya peleó en su día contra la de Chuli o la de dos mitos del Lega en Segunda B como Dioni y Carlos Álvarez.
“Me veo de titular, claro que sí. Me veo bien. La pretemporada ha sido buena. Pero no es mi decisión. Es de Asier”, analiza precavido.
“La competencia es buena. Te hace estar avispado. Te hace sentir alerta. Si te duermes te vas al banquillo o a la grada”, dice con conocimiento de causa. ¿Y Guillermo? “Es un gran futbolista. Lo ha demostrado en el Athletic. Tenerle es bueno para él y bueno para el Leganés”, insiste. “Como persona no lo conozco demasiado, pero el poco tiempo que ha estado aquí se le ve un gran compañero. Es un futbolista que ha jugado y marcado en Champions. Un delantero del Athletic. Un futbolista de peso”, añade.
Su respuesta suena a tópico, pero no lo es. Cree en sus palabras porque ha sido así, con competencia, como ha logrado crece hasta salir del pozo de Tercera División y brillar en la categoría de plata. “A todos nos hace bien tener gente que te hace la cama. Para mí es genial”, continúa.
“Esta temporada no me marco ningún objetivo. Me gustaría llegar al mismo objetivo del año pasado, pero no quiero presionarme. Lo que pase, pasará. Siempre con humildad para sacarle jugo a cada minuto que tenga”, concluye.