MÁLAGA
Kameni: ''Muchas veces me pongo en la piel de Ochoa''
Hace aproximadamente un año, el Málaga había fichado a Memo Ochoa y solicitó de Kameni la rescisión de su contrato. Las cosas cambiaron.
¿Se puede decir que ésta última ha sido la mejor temporada de su carrera deportiva?
“Una de las mejores porque gracias a Dios no tuve lesiones. Pude jugar todos los partidos de Liga. En el Espanyol llegué a jugar 37… Ha sido un año casi completo porque volví tras dos años sin jugar y la gente se había olvidado de mi. Yo seguía a la sombra de Willy Caballero, trabajando. Me han salido muy bien las cosas y este año quiero repetir lo mismo o hacer más”.
En los once años que lleva en España ha vivido de todo.
“En mi vida nunca me han regalado nada porque desde pequeño mis padres me acostumbraron a luchar para ganar todo lo que quiero. El fútbol es una competencia eterna. Cada día te debes ganar el puesto. Cuando llegué a España, venía de no jugar en Francia en el filial. Y fiché por el Espanyol que tenía porteros internacionales como el belga Lehmann. Teníamos a Gorka (Iraizoz) que se fue cedido. ¡Empecé como titular! Volvió Gorka y seguí de titular. Vinieron Kiko Casilla, Cristian Álvarez. Dejé de jugar y vine al Málaga al banquillo, porque Willy lo estaba haciendo de maravilla. Me tocó el lado negativo de las cosas. Pero eso te ayuda también en tu profesión porque te permite ser más fuerte afrontando las cosas.
¿Alguna vez se dijo a si mismo, ‘si lo sé no vengo’ cuando las cosas le estaban viniendo mal?
“Nunca me arrepiento de las decisiones que he tomado. Yo venía para jugar, pero como Willy lo estaba haciendo bien, Pellegrini me dijo que me tocaba esperar mi turno. Era seguir trabajando. Quizá me he equivocado en el momento de la elección de venir al Málaga. Tenía que haber venido un poquito antes o esperar un año más en el Espanyol. Pero son cosas de la vida y he vivido un momento increíble. Yo estaba conviviendo con un grupo. El trabajo de Willy fue tan bueno porque él sabía que tenía una presión mía por detrás”.
Y esto ahora le está pasando a Ochoa.
“Cada uno tiene su manera de encajar las cosas. Muchas veces me he puesto en el lugar de Guille. Viniendo del Mundial que había hecho y venir al Málaga con lo que le habían prometido… No sé. Llegar y estar en el banquillo es un shock. Cualquiera no lo aguanta. Si yo lo he aguantado no significa que todo el mundo lo tenga que aguantar. Y él no supo controlar eso”.
¿Le comprende en esta situación?
“Es normal que uno esté mosqueado cuando no juega. El futbolista que esté contento de estar en el banquillo tiene que dejar el fútbol. Todos queremos jugar. Eso es normal. Cuando jugaba Willy yo estaba mosqueado porque quería jugar, pero sólo puede salir uno. ¿Qué vas a hacer?”.
¿Qué tal es Kiko Casilla a quien conoce de su paso por el Espanyol?
“Tenía muchas cosas. Antes de venir al Espanyol venía del filial del Real Madrid. Tiene muy buena altura, es muy valiente y muy buen juego con los pies. El Espanyol tiene una muy buena escuela de porteros con Tommy N’Kono que lleva mil años ahí”.
¿Le gusta más Casilla o Navas?
“Son distintos. Navas es muy bueno bajo los palos y Kiko es Kiko”.
¿Ha tenido ofertas para marcharse del Málaga?
“Este año concretamente hubo cosas, pero ofertas concretas no. El año pasado sí. Se habló del Burdeos. Pero el año pasado tuve varias ofertas”.
¿Y lo de su renovación con el Málaga?
“Yo no decidí renovar con el Málaga. Yo tenía un contrato y me habían asegurado mi continuidad con la salida de Willy. La verdad es que recibí un mazazo a la vuelta de la gira por Alemania porque me pidieron rescindir mi contrato. Yo les dije: ‘Si no me queréis, pagarme y me voy’. No lo hicieron. Faltaban 10 días para empezar la Liga y me hicieron una oferta a la baja. Acepté para poder seguir luchando”.
Tiene contrato por esta temporada y dos más. ¿Se ve mucho tiempo en el Málaga?
“¿Por qué no? Tengo 31 años y mi familia está muy a gusto aquí. Me siento muy querido por la afición. Es una bonita ciudad. Me dijeron que aquí he caído de pie. No solo cuando he empezado a jugar. He notado el cariño de la gente desde el principio, seguramente por mi trayectoria y mi forma de ser”.
¿Cómo ve este año la Liga española?
“Real Madrid, Barcelona y Atlético son los tres que pintan alto pero ojo que hemos visto lo que ha hecho el Valencia el año pasado y a ver qué hace el Sevilla que siempre está ahí. Ojalá sea una Liga abierta”.
El calendario duro. Empiezan con el Sevilla y el Barcelona.
“Pero puede venir bien empezar fuerte. Al Barcelona le ganamos. Bonito campo. Es una victoria que te marca toda la vida. Lo hicimos muy bien”.
¿Qué destacaría de Javi Gracia como entrenador?
“Más que un entrenador es la continuidad de un futbolista que vive su pasión. Está siempre en su trabajo. Transmite mucha seguridad y muchas ganas. Es como si estuviera en el campo con nosotros”.
¿De no haber sido futbolista, a qué se habría dedicado?
“No lo sé. Me gustaba también el voleibol. Todos mis hermanos, familia de ocho han jugado al baloncesto y yo era el único que hacía fútbol. En los estudios iba muy bien. Acabé el bachillerato para ir a la Universidad, pero tras el Mundial de 2002 ya tenía en mi mente vivir del fútbol. Al principio me metí en tema de informática y muchas cosas de comunicación”
¿Su fe religiosa le ayuda?
“No estamos en este mundo por casualidad. Creo en Dios y esta fe la tengo desde pequeño. Intento vivir alegre y transmitir esta alegría. Llegar bien e irme bien sin tener ningún problema con nadie. Si crees en dios debes tener una fe intensa. No mitad y mitad. O crees, o no crees”.
Hablemos del Málaga. ¿Cómo se enfoca esta nueva temporada que se avecina?
“Como las anteriores. Temporada nueva, espíritu nuevo. No cambiar muchas cosas y seguir con nuestras mismas ganas porque somos luchadores, trabajadores. Queremos hacer muy bien las cosas”.
Seis jugadores nuevos…
“El fútbol es así. Cada año hay jugadores que vienen y otros que se marchan. Hay algunos cambios pero lo que hemos mantenido es la base del grupo que llevamos desde hace dos años. Es positivo no romper todo de golpe y hay muchos jugadores que han llegado con mucha calidad, que nos ayudarán para hacer una muy buena campaña”.
¿Hasta dónde puede llegar este Málaga?
“ En mi vida nunca me pongo techo. Aquí vamos paso a paso y partido a partido. Cada día es una faena y hay que pensar en día siguiente, viviendo bien e intensamente en el presente. El futuro, ya veremos. Queremos que el Málaga haga una muy buena temporada”.