Lopetegui espera a Casillas en Holanda el próximo lunes
Iker Casillas y el Real Madrid ya han llegado a un acuerdo para que el portero fiche por el Oporto. Casillas se reuniría con sus nuevos compañeros en Holanda.
El Oporto viajó ayer a Horst (Holanda) para continuar allí su pretemporada y lo hizo sin Casillas. Lopetegui espera que su nuevo portero llegue al stage holandés el próximo lunes y que ya comience a trabajar. El técnico español se llevó a 26 jugadores, entre ellos a cuatro porteros: Gudiño, Helton, Nunes y el español Andrés Fernández, ex de Osasuna, fichado por recomendación suya y con el que apenas contó el pasado año. Al exportero Lopetegui parece que no le gusta ninguno, pues en la pasada temporada tiró mucho de Fabiano, al que quitó de la portería tras el 6-1 del Bayern. Ahora se ha ido a Turquía.
Casillas llega para jugar, de eso no hay duda; para ello el presidente Pinto da Costa ha roto los límites salariales que imponía a rajatabla. La cuantía de la nómina de Casillas no ha estado exenta de críticas, internas y externas, como la del directivo benfiquista Gaspar Ramos, que califica a Casillas de “un exceso” del presidente del Oporto para tapar la carencia de títulos en los dos últimos años, algo a lo que no estaba acostumbrado el veterano presidente (33 años al frente del club).
Pinto da Costa le construyó un equipo a Lopetegui la pasada temporada y ahora se lo ha deshecho (como es habitual, por otra parte). Ha vendido al lateral Danilo al Madrid (31,5 millones), al delantero Jackson Martínez (otros 30), el Madrid ha rescatado a Casemiro (que en Portugal ha amueblado la cabeza), y el Atlético a Óliver (que ha mejorado en el trabajo, aunque quizás no suficiente para Simeone). Es decir, Lopetegui se ha quedado sin columna vertebral, que deberá reconstruir con el francés Imbula, y ver si saca partido a algún otro capricho, como Adrián.
De momento, Lopetegui impone su autoridad. Ha despachado al ídolo de la afición, Quaresma, una de las mejores piernas diestras del mundo, de infinita clase, pero limitado trabajo. En el fútbol de hoy no hay sitio para que quede rebajado de servicio uno de los once, a no ser que se llamen Messi o Cristiano. Quaresma no va a Holanda y parece que su destino es el Besiktas turco.
Orgullo. Y llega Casillas. La liga portuguesa es una liga Maldini, de esas que hay que mirar para descubrir perlas brasileñas o latinas antes de que alcancen precios desorbitados. Tampoco los clubes tienen el suficiente poder económico como para resistir los embates millonarios de equipos de otras ligas, principalmente inglesa, francesa y española. Así que se comprende el orgullo de que, por una vez, llegue una estrella mundial como Iker Casillas y, en plena madurez (34 años). Helton, el último en la portería del Oporto, tiene 37 años.