Álvaro Negredo: “Para la gente quizás soy un fichaje nuevo”
Se fue en mayo para volver. Para ser “el que era”. El Negredo del Almería, Sevilla y City. El goleador que lleva dentro y que por circunstancias no apareció el curso pasado.
—No era la final de la Champions, pero empezar con gol siempre está bien.
—(Ríe). Sí claro, siempre es bueno y más yo que necesito reencontrarme con muchos goles.
—En Columbus dijo a la afición que a la vuelta de vacaciones se volverían a ver y aquí está.
—Así lo dije y así ha sido.
—¿Nunca se ha visto fuera?
—Nunca. Nadie ha hablado de mi futuro. Al menos no conmigo. En verano no escuché nada y tenía la conciencia tranquila. Sabía que iba a seguir aquí.
—¿Necesitaba este verano desconectar más que en otros?
—Sí necesitaba desconectar, pero como cualquier otro compañero. Las temporadas se hacen largas y hay que cargar las pilas. Y eso lo he conseguido. Ahora solo tengo la mente en el Valencia y en lograr los objetivos.
—¿En algún momento en la playa ha encontrado la respuesta a qué le pasó el año pasado cara a puerta?
—Siempre piensas qué ha podido pasar o qué no. Hubo un poco de falta de confianza para estar más metido, más entonado con el gol. Me costó entrar en la dinámica. La lesión me privó de una pretemporada y ésta la hice solo, a mi bola, con un fisio... y uno necesita estar en la dinámica de un grupo. Claro que piensas en el porqué, y más cuando eres un delantero que ha tenido gol, mis estadísticas lo dicen, también dicen que el año pasado fue malo para mí. Eso nadie lo duda. Yo el primero que lo digo. Pero también que mis temporadas pasadas están ahí y ahora empiezo de cero para volver a ser el mismo que era.
—¿Se siente como un fichaje por aquello de que ha sido ahora cuando el Valencia ha pagado por usted?
—Yo no. Para la gente quizás soy como un fichaje nuevo. Pero yo sabía cómo iba el contrato. Sabía que en el momento en el que jugara un partido era jugador del Valencia, solo que se pagaba al año siguiente.
—¿Qué objetivos se marca?
—Los objetivos prioritarios siempre son colectivos. Y más cuando a corto plazo tenemos uno que cumplir como es estar en Champions. En lo personal, ayudar.
—¿Esa previa camba el chip de la pretemporada?
—Sin duda. Nos jugamos una cosa muy, muy, muy importante y bonita. Y nos la jugamos ya, en pocas semanas.
—¿Es el Valencia como creía?
—Me ha sorprendido gratamente la afición. Está entregada, metida... desde fuera, con el Almería o Sevilla, sentía que cuando van mal las cosas había cierto runrun en Mestalla. Pero he vivido lo contrario. El apoyo es total. Y otra cosa que me llamó la atención es la juventud del vestuario. Sabía que el club iniciaba un proyecto nuevo, pero ví mucha juventud. Jugadores que apenas eran conocidos y que han dado un rendimiento increíble.
—¿Cuando uno entra a este vestuario, se ve en la posición de ejercer de veterano?
—Sí, claro. Por una cuestion de edad y por momentos vividos y experiencia. No quiero ser el padre... pero en todo lo que pueda ayudarle, mejor. Porque entramos en una competición que es lo máximo a nivel de club y para muchos será su primera participación y habrá que ayudarles.
—¿Es un hándicap esa juventud en la Champions?
—No hay que darle más responsabilidad de la que tienen, pero la Champions obliga a dar un paso al frente y decir: ‘voy a demostrar que puedo jugar con los mejores del mundo’.