A las puertas del ascenso

El Betis vislumbra el final del túnel y el Alcorcón no quiere ser el invitado de honor a su fiesta. Un triunfo de los de Pepe Mel otorgaría el ascenso matemático tras un tramo final de campeonato de récord. Antes, Gerona y Gijón podrían entregar el billete a Primera a los verdiblancos sin siquiera saltar al césped de un Villamarín que vivirá un ambiente de lujo para buscar la meta.

El equipo bético lo tiene todo de cara. Su fiabilidad en las últimas jornadas, logrando 25 de los últimos 27 puntos, hace creer en la consecución final del ascenso. Enfrente estará el Alcorcón, equipo que vivió el estreno esta campaña de Mel en su regreso al banquillo. No quiere ser un mero invitado en una fiesta fabricada merced a una racha impecable. Ceballos tirará de la construcción para romper una muralla que aguantó intacta en la primera vuelta, mientras Rubén Castro y Jorge Molina formarán la dupla más temida de la categoría por su excelente momento de forma.

Bordalás, que anunció su adiós de cara a la próxima temporada, confiará sus bazas a la velocidad de David Rodríguez y a la capacidad de desborde de Kiko Femenía. El último antecedente entre ambos en el Villamarín fue en enero de 2011. Los béticos golearon y el equipo entrenado también por Mel terminó ascendiendo a Primera División.

Combinaciones. Los números favorecen a los verdiblancos. Si Girona y Sporting vencen sus duelos, el equipo de Mel estará obligado a vencer. Pero el Villamarín quiere que su pesadilla termine para dibujar su sonrisa más esperada y celebrar un ansiado ascenso.