NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

VIOLENCIA EN EL FÚTBOL

La Policía mantiene su versión sobre la muerte de Jimmy

Prepara un informe para el juez para esclarecer las dudas que le han llevado a ordenar la salida de prisión de los cuatro hinchas del Frente Atlético.

La Policía mantiene su versión sobre la muerte de Jimmy

La Policía insiste en su versión sobre la muerte del seguidor del Deportivo de La Coruña y miembro de los Riazor Blues Francisco Javier Romero, alias Jimmy, y está preparando un nuevo informe de la investigación para el juez que ayer ordenó la libertad de los cuatro supuestos autores de la muerte.

Fuentes policiales han señalado que en ese informe los investigadores tratarán de esclarecer las dudas que han llevado al titular del Juzgado de Instrucción número 20 de Madrid a ordenar la salida de prisión de los cuatro hinchas del Frente Atlético a los que la Policía considera que intervinieron directamente en los hechos.

El magistrado Juan Antonio Sáenz de San Pedro tomó esta decisión tras tomar declaración de dos testigos, un agente de movilidad y el autor de uno de los vídeos de los sucesos, de cuyos testimonios "se desprenden dudas más que razonables" sobre la participación directa de esas cuatro personas en los hechos que causaron el fallecimiento de Jimmy".

Las fuentes policiales han precisado que los investigadores han hecho su trabajo y que las pruebas, indicios y vídeos analizados ratifican su versión de los hechos.

Al parecer, las declaraciones de esos testigos señalaron que el primero en caer al río Manzanares tras una pelea entre seguidores del Riazor Blues y del Frente Atlético no fue Jimmy, sino otro seguidor del Depor que también cayó al río y que salió por su propio pie.

Sin embargo, los investigadores insisten en que la primera persona que cayó y resultó apaleada fue sin duda alguna Jimmy. El juez ha dejado en libertad a los cuatro, sobre los que mantiene, no obstante, la imputación de participación en riña tumultuaria.

El pasado 18 de diciembre, el juez dictó prisión comunicada y sin fianza para tres presuntos autores de la muerte del hincha del Deportivo, si bien ninguno reconoció su participación en los hechos durante su declaración ante el magistrado.

Cinco días más tarde, el titular del juzgado número 54 de Madrid ordenó el ingreso en prisión de una cuarta persona detenida en Valencia y acusada también de la muerte de Jimmy, que se produjo el pasado 30 de noviembre en las inmediaciones del Vicente Calderón.

Los hechos tuvieron lugar sobre las nueve de la mañana, cuando unos doscientos ultras del Atlético de Madrid y del Deportivo, estos últimos apoyados por otros grupos ultras de ideología similar, se enzarzaron en una reyerta ante de la celebración del partido de liga entre estos dos equipos.

Ultras del Frente Atlético y de los Riazor Blues, apoyados por los Bukaneros del Rayo Vallecano, los Alkor Hooligans del Alcorcón y los Ultra Boys del Sporting de Gijón, habían quedado para pegarse a "mano abierta" -sin armas-, aunque, como se pudo constatar, los radicales utilizaron barras de hierro, bates, palos y todo tipo de elementos contundentes.

Once heridos y un muerto -el hincha del Dépor Jimmy a quien arrojaron al río tras propinarle una brutal paliza- fue el trágico resultado de esa pelea, organizada dos semanas antes por los "hombres de confianza" del Frente Atlético y de los Riazor Blues mediante contactos telefónicos.

Por estos hechos, la Policía detuvo a 82 personas en el marco de la Operación Neptuno, aunque tan solo cuatro ingresaron en prisión y el resto quedaron en libertad con cargos por un delito de riña tumultuaria y otro de desórdenes públicos.

El partido no se había declarado de alto riesgo y, por tanto, el dispositivo policial era el previsto para partidos no conflictivos: un centenar de agentes de Policía Nacional, entre antidisturbios, Caballería y guías caninos, así como por 60 agentes de la Policía Municipal.

En el terreno deportivo, el Atlético de Madrid expulsó al Frente Atlético del coliseo rojiblanco, mientras que el Deportivo cerró de forma simbólica la grada de los Riazor Blues en el estadio de Riazor durante dos partidos.