ESPANYOL - REAL MADRID
La huelga y la crisis blanca frenan la venta de entradas
Hasta el viernes, se habían despachado algo más de 5.000 localidades en Cornellà. Pese a todo, el Espanyol podría recaudar cerca de 600.000 euros.
El pasado lunes, la entidad blanquiazul comunicaba que ya se habían vendido 4.500 entradas para el partido de mañana frente al Real Madrid. Han transcurrido ya cuatro días desde aquella fecha —se han abierto incluso las taquillas— pero el ritmo de venta se ha visto frenado de forma considerable. A día de hoy, la entidad blanquiazul ha despachado poco más de 5.000 entradas y se espera que puedan llegar a las 6.000 en estos dos días que restan. Pese a que la cantidad no es superior a la de la campaña anterior, el precio de las entradas —que oscilaban entre los 90 euros y los 210— propicia que la entidad podría ingresar alrededor de 600.000 euros de taquilla.
La entidad perica achaca esta mengua en el ritmo de venta de entradas a dos factores que han convertido esta semana en extraña, futbolísticamente hablando. El primero de ellos es la huelga de la AFE y el parón indefinido que decretó la RFEF. Hasta el jueves al mediodía no se desatascó esta situación, lo que hizo que muchos aficionados desistieran de acudir al choque. Por otro lado, también está la eliminación del Real Madrid de la Champions en manos de la Juventus. Muchos aficionados del equipo merengue, que siempre se movilizan en este tipo de partidos, han perdido interés ante la crisis —si se puede llamar así— por lo que atraviesa el equipo de Carlo Ancelotti, hastiado por la imposibilidad de ganar Liga, Copa del Rey y Champions League.
Pese estos contratiempos, y si el socio perico responde, se podría registrar la mejor entrada de la temporada en la Liga, que hasta la fecha es la que se produjo el día del derbi, con 30.253 espectadores. Lejos quedará la del partido de Copa ante el Athletic, en la que acudieron 34.831 aficionados, casi todos ellos pericos.