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SELECCIÓN

Del Bosque tendrá que sacar a media Selección de la playa

España jugará un amistoso el 11 de junio ante la Costa Rica de Keylor Navas. Tres días después La Roja disputará un partido de clasificación ante Biolorrusia.

La Selección se medirá a la Costa Rica de Keylor Navas el 11 de junio.

España jugará un amistoso el 11 de junio ante la Costa Rica de Keylor Navas. La FEF baraja dos escenarios posibles: algún estadio del norte de España o Suiza.

Tres días después, el 14 de junio, la Selección jugará un partido de clasificación para la Eurocopa ante Bielorrusia, en Minsk. El encuentro será importante, porque los de Del Bosque necesitan ganar si quieren seguir la estela del líder del grupo, Eslovaquia.

En el cuerpo técnico de la Selección hay inquietud, ya que la Liga acaba el 24 de mayo y muchos de los internacionales ya estarán o de vacaciones o a mínimo nivel de entrenamiento y competición con sus clubes. Los del Athletic y del Barça tendrán más ritmo competitivo, ya que el 30 de mayo disputan la final de Copa. Igualmente los internacionales del Madrid y el Barça podrían seguir compitiendo si llegan a la final de la Champions, el 6 de junio. Desde el final del campeonato liguero hasta el partido ante Bielorrusia habrán pasado tres semanas, tiempo en el que los futbolistas internacionales ya estarán de vacaciones, oficiales o semi, ya que la alternativa son los partidos lúdico-festivos a destinos exóticos por el afán recaudatorio de los clubes. Prácticamente habrá que sacar a los jugadores de las playas para el decisivo partido contra Bielorrusia.

La Federación valora una excursión en familia

La Federación está seriamente inquieta por el hecho de que haya un período de tres semanas entre el final de la Liga y el partido, casi decisivo para la clasificación de España para la Eurocopa del año que viene en Francia, frente a Bielorrusia. El cuerpo técnico está barruntando ideas para solucionar el problema. Entre otras, y dado que el encuentro prácticamente pillará a los de vacaciones, o casi, la de organizar una miniconcentración para preparar el partido ante Bielorrusia en un destino atractivo, próximo a Minsk, al que invitarían a las familias de los jugadores. La idea es cara, pero la FEF está dispuesta a correr con los gastos si eso ayuda a los futbolistas a volver al nivel competitivo tras un buen período de relax.