GRANADA
Pina encabeza la expedición que se concentra en Marbella
El presidente todavía cree en la permanencia y quiere convencer a la plantilla, que permanecerá dos días concentrada en la Costa del Sol.
El Granada regresó a los entrenamientos en la mañana del martes con la intención de recuperarse cuanto antes del golpe anímico que ha supuesto la derrota sufrida en Almería. Recobrar la intensidad y la ilusión de los jugadores es ahora el primer objetivo de Abel Resino, sobre todo tras la imagen de equipo hundido ofrecida en el Juegos del Mediterráneo. La expedición parte mañana hacia Marbella y lo hace con el presidente a la cabeza. Quique Pina quiere quemar las naves antes de darse por vencido y cree que dos días todos juntos en la Costa del Sol puede ser el camino más corto para encontrar la unidad del vestuario ante una situación tan grave. El presidente sabe que todavía hay posibilidades reales de conseguir la permanencia y que una victoria ante el Sevilla este domingo dejaría al equipo con casi toda seguridad a solo un punto de la permanencia cuando queden 18 en juego. Las consignas que Pina y su lugarteniente Juan Carlos Cordero se llevan a Marbella son claras: hablar con los jugadores, pasar mucho tiempo juntos, convencerles de que todavía es posible conseguir la permanencia y hacerles ver que está en juego la estabilidad de todo un proyecto deportivo.
El equipo rojiblanco se ejerció este martes en la Ciudad Deportiva de Armilla con las bajas de Babin, Cala y Márquez, aquejados de molestias musculares leves que aconsejan alargar la inactividad. En el entrenamiento también se pudo ver a Colunga, cuya recuperación total está cada vez más cerca y podría estar listo para el encuentro del lunes 27 en Mestalla. Una de las sorpresas fue la presencia de Success, el delantero del filial en quien confió Caparrós y que desde la llegada de Abel apenas ha contado. Su participación en el entrenamiento da a entender que el técnico busca un revulsivo.