Málaga antes del huracán

Simeone convirtió en modo de vida lo de ‘partido a partido’ para días como este. El Atleti visita al Málaga (sigue el partido en directo en as.com) con la sombra descomunal de la Champions abalanzándose sobre su espalda, pero tendrá que aguantar unas horas más sin girar la cabeza. El maratón liguero le ha permitido recuperar el tercer puesto sin gastar energías ante Córdoba y Real; un tercer triunfo le permitiría afrontar el derbi en la situación idónea: sin más preocupación que convertirse (de nuevo) en héroes, que ya es bastante.

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Pero el Málaga de Javi Gracia (entrenador en crecimiento constante) no es cualquiera. La juventud de su base le condena a una irregularidad encantadora, tan capaz de perder contra un Eibar en caída libre como de derrotar al Barça o al Valencia. Si el Atleti es un profesional serio y extremadamente competente, el Málaga es un adolescente talentoso, que lo mismo te saca un diez que decide no levantarse de la cama. En esa montaña rusa, se ha quedado en una incómoda tierra de nadie: séptimo (que dará Europa League si el Barça gana la Copa) a cinco puntos del sexto y del octavo.

Lesiones. El resultado de hoy le ayudará a saber si mira hacia arriba o hacia abajo. La baja de Camacho, subrayado en amarillo fosforito en la agenda del Atleti al igual que Samu Castillejo, hace mucho daño al Málaga, que sólo ha sumado cinco puntos de 24 posibles sin el internacional formado en el Manzanares. Para los de Simeone, recuperado Godín y asentado Oblak en el puesto de Moyá, la principal ausencia es la de Mandzukic, que sigue de baja por su guadianesca lesión de tobillo. Torres tendrá otra oportunidad de recuperar el buen nivel que mostró antes del parón y, por si acaso, a los rojiblancos siempre les quedará Griezmann, un portento.

El encuentro será especial para Jesús Gámez, asentadísimo como titular en la banda izquierda y que regresa al estadio donde se formó y es una ídolo: 253 partidos en nueve temporadas. Su reencuentro será una de las últimas sonrisas plácidas antes de apretar los dientes. Se acerca el huracán.