Luis Aragonés ya tiene su campo de fútbol en Alcobendas

Desde esta mañana, cada persona que pase por el Polideportivo Municipal de Alcobendas, en la carretera de Barajas, kilómetro 1,400, verá el nombre de Luis Aragonés en letras gigantes, blancas, sobre fondo azul, le recordará. Es el homenaje que la ciudad en la que el técnico, exjugador rojiblanco y exseleccionador nacional vivió sus últimos años quiere rendirle. Que nunca nadie olvide su grandeza. Dentro de los campos. Fuera. Por eso le han cambiado el nombre de su campo de fútbol. Ya no será más José Caballero. Desde esta mañana a las 11:51 se llama Estadio Luis Aragonés. "Hay muchas razones por las que Alcobendas quiere hacerle este reconocimiento, este homenaje de gratitud. Fue nuestro pregonero en 2010 y su carácter humano ha calado en muchos jóvenes de esta ciudad. Además, su relación con la ciudad puede ser un efecto para que declaran a esta localidad Ciudad del Deporte 2015", resumió su alcalde, Ignacio González de Vinuesa. Junto a él, emocionada, la mujer de Luis, Pepa, a quien el alcalde se permitió el lujo de llamar todo el tiempo Pepi. Así la decía Luis. "Me permitirás que hoy te llame así porque hoy Luis está con nosotros", explicó Ignacio González de Vinuesa, minutos después de descubrir una placa a la entrada del recinto, junto a toda la familia de Luis, que guardará para siempre las emociones de este día.

Y es que en el acto, además de Pepa, había cinco hijos de Luis Aragonés y once nietos, uno, Luis, además, participó en el torneo de fútbol con el que el estadio a su nombre se bautizó. Lo hizo en las filas del combinado de Alcobendas que se midió a la selección Sub-16. Justo después del homenaje (que incluyó la actuación del grupo Chaito y Palosanto, con la canción que escribieron al exrojiblanco hace un año), a las 12:00, los veteranos rojiblancos saltaron al césped para jugar por su amigo, por su referente, por Luis Aragonés. Perdieron 2-0 con un combinado de una selección de Madrid (con jugadores míticos como Michel, Ruben Reyes, Pedro Aguado, Iván...), pero jugadores como el Mono Montoya, Alejandro, Zapatera, Arzeno, Luis García, Alfaro, Estebaranz, Río o Ramos se partieron la cara por ofrecerle esa victoria a Luis Aragonés mientras Miguel San Román, su entrenador, se emocionaba y Adelardo resumía qué suponía este día para todos ellos: "Este es un emotivo gesto por todo lo que Luis le ha dado al fútbol. Era muy buen compañero y alguien muy humano, dentro y fuera del campo. Lo merece".