Parejo y Alcácer asaltan el tercer puesto del Atlético

En Valencia el sol sale hasta en un día nublado. Y al equipo de Nuno le sucede lo mismo. La de ayer fue una victoria de esas que de primeras no buscó con el ahínco de otras veces y sin embargo sí mereció cuando se puso el disfraz de rodillo en la segunda mitad. Parejo, de penalti, y Alcácer, en el segundo balón que tocaba tras un mes de baja, le dieron tres puntos con los que afianza su candidatura a la Champions y que le permitirán llegar a esas diez últimas jornadas en las que decía Luis Aragonés que se juegan las habichuelas (hoy es tercero a cinco puntos del líder). En A Coruña, el sol se hace de rogar y la salvación, más todavía.

El Valencia, como decíamos, se dejó la intensidad en el Calderón. Y Mestalla se lo hizo saber con pitos que sonaban a un ‘a ver si despertáis’. Hasta el descanso no fue el Valencia veloz y aguerrido por el que aboga Nuno. Tampoco Negredo tiene la pólvora que en estos días de Fallas altera la ciudad. Ello se comprobó en cuatro remates a bocajarro a las manos de Fabricio. Como de eso se percató el Depor, estos se vinieron arriba con Cavaleiro, uno de esos jóvenes por los que tiene preferencia el fondo de Lim (en el palco), de líder. Y así se fueron al descanso más cerca de Alves que de Fabricio.

Pero el Valencia despertó. Con Enzo bien en la contención y Piatti animando el cotarro. De una ocasión del argentino nació el penalti de Juanfran. Parejo no perdonó. Ese Valencia sí lo merecía y el Depor asumía su suerte. Y para encender la mecha a las Fallas, gol del ojito derecho de Mestalla: Alcácer.