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Elche

Otra auditoría revela un agujero en el Elche de 1.530.670 euros

La cantidad no ha sido justificada por el club y la Fiscalía investiga si puede estar relacionada con el amaño de partidos. El Elche reconoce "falta de rigor".

EN LOS JUZGADOS. El presidente del Elche, José Sepulcre, y su mano derecha en el club, Antonio Rocamora, saliendo de la Ciudad de la Justicia de Elche el pasado 18 de noviembre de 2014.
Fito González

Con el escándalo de Osasuna todavía en llamas, un nuevo club está en el centro de la investigación por presunto fraude y amaño de partidos: el Elche. Una auditoría complementaria realizada al club ilicitano por la empresa BDO (la misma que destapó las irregularidades en Osasuna) revela un agujero de 1.530.670 euros que no están justificados y se indaga si pueden estar relacionados con una posible compraventa de partidos. El Málaga-Elche de la antepenúltima jornada de la pasada temporada (0-1) ya fue motivo de investigación hace unos meses por parte de la LFP, aunque finalmente no se presentó denuncia. Y no fue el único partido del equipo alicantino que se investigó por parte del Departamento de Integridad de la Liga. Además, ese millón y medio no es la única cantidad que ha despertado sospechas en la auditoría.

La misma señala también un desfase en el arqueo de caja del club a 30 de junio de 2014, ya que se incluyó como efectivo una parte de una de las taquillas del mes de mayo (la correspondiente al decisivo partido contra el Barcelona) que ya se había cobrado a través de una cuenta bancaria (219.241,42 euros). Las cantidades podrían estar relacionadas con ingresos de dinero de unos 40.000 euros a una decena de futbolistas. Hay que recordar que el fiscal anticorrupción, Alejandro Luzón, detectó maniobras similares antes de imputar a los implicados en el presunto amaño del Zaragoza-Levante de 2011.

Los resultados de esta auditoría complementaria vienen explicitados en la resolución del juez de lo Social de la LFP, Manuel Rivero González, a la que tuvo acceso AS, que inhabilitó al presidente del Elche, José Sepulcre, y a su secretario general, Antonio Rocamora. Se da la circunstancia de que la LFP no es el único órgano que examina esa desviación en las cuentas del club. El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana y la Brigada de Blanqueo de Capitales del Cuerpo Nacional de Policía también indagan el rastro del dinero y se ha llegado a producir algún registro en la sede del club.

El informe de la auditora deja constancia de la existencia de una gestión extracontable de la tesorería, traspasos de cantidades de efectivo de caja a la Fundación del Elche sin contabilizar y diferencias superiores de 300.000 euros entre lo traspasado a la Fundación y las devoluciones de ésta al club. También desvela diferencias entre el estado de flujo efectivo aportado al CSD con el ofrecido a la auditora. En concreto, una diferencia de tres millones, consecuencia de reducir la cifra de pagos a proveedores desvirtuando el déficit de tesorería.

Dos circunstancias concurren en la investigación al Elche. Por un lado, se indaga si hay relación entre la fuga de dinero y una posible compraventa de partidos. De otro lado, se intenta aclarar si existe falsificación contable, administración fraudulenta o apropiación indebida por parte de los administradores del club, a pesar de que el TAD ha suspendido cautelarmente su inhabilitación. La auditoría también se cuestiona otra cantidad no especificada de entre cinco y seis millones de euros y que fue justificada en obras de acondicionamiento del Martínez Valero y otros trámites burocráticos que tienen que ver con el registro de las oficinas del estadio del club franjiverde.

El caso guarda similitudes con el terremoto que ha afectado a Osasuna. Una auditoría interna en el club navarro que sacaba a la luz una desviación de 2,4 millones de euros puso en alerta a la LFP, que investigó la posible relación con el amaño de partidos hasta que encontró indicios y se apoyó en la colaboración del exgerente, Ángel Vizcay, que reveló intentos de compra de partidos. Falta por saber ahora si el órgano que preside Javier Tebas será capaz de encontrar una confesión tan contundente como la de Vizcay, que ha derrumbado el castillo de naipes del club rojillo. La LFP tenía denunciada la situación del Elche ante el Juzgado de Disciplina Social desde noviembre, cuando le remitió la auditoría complementaria.

El Elche reconoce en su propio informe “deficiencias en la contabilidad”, “falta de rigor”, “múltiples deficiencias de control interno” y “existencia de gestión extracontable”. Un artificio que, apoyado en el agujero 1,5 millones, empujó a la LFP a abrir una investigación y a poner los hechos en conocimiento de la Fiscalía y de la Policía.