Mariona: "Verme en el banquillo del Barça me ha hecho crecer"

Es mallorquina, de Felanitx, y como buena mallorquina es, cómo no, fan de Rafa Nadal. Pero el paralelismo entre Mariona Caldentey y el tenista de Manacor, va más allá de compartir origen. Mariona (19-3-1996) es otra deportista especial, luchadora, trabajadora y decidida, que transmite su pasión dentro y fuera del terreno de juego. Es además, una jugadora clave en el centro del campo de la Selección Sub-19. El año pasado se quedó en puertas de la gloria, al perder la final del Europeo de la misma categoría ante Holanda, una pequeña decepción que no olvida y la toma como una motivación.

A poco más de un mes para el PreEuropeo de Portugal, en el que la Sub-19 se jugará la posibilidad de volver a estar en una fase final y tomarse la revancha, la centrocampista del Barcelona, reconoce las ganas de revancha que hay en el equipo: “El equipo está con muchas ganas. El año pasado nos quedamos en el último pasito. Tenemos muchas ganas de competir y de hacer lo bien”.

España jugará el PreEuropeo, del 4 al 9 de abril, encuadrada en el grupo 1 junto a la anfitriona, con la que debutará, Turquía y Finlandia. Se clasifican para el Europeo de Israel (del 15 al 27 de julio) los primeros de los seis grupos y el mejor segundo. El PreEuropeo coincide por completo con la Semana Santa: “No pasa nada. Ojalá todas las vacaciones fueran así. Ya tendremos tiempo”.

Con el Europeo como primer objetivo, es inevitable ver en el horizonte el Mundial Sub-20 de 2016, para el que se clasifican los primeros del Europeo. “Nos centramos en el Europeo, pero sí que tenemos presente el premio que podemos obtener. El Mundial ahora no es nuestro objetivo, pero sí es un plus de motivación”, confesó Mariona.

Mariona Caldentey está viviendo un momento dulce. Tras fichar esta temporada por el Barcelona, está entrando cada vez más en el once, algo que ha conseguido a base de trabajo: “Al fichar por el Barça hice un cambio muy grande, no sólo por el cambio de club sino por el hecho de dejar la isla e irme lejos de mi familia. Al principio me costó, sobre todo porque empecé jugando poco, pero está claro que el que no arriesga, no gana. Sabía a lo qué iba y al final he ido entrando poco a poco en el equipo. El Barça es otro mundo. No tiene nada que ver a los equipos donde he estado hasta ahora. El hecho de verme en el banquillo y tener que luchar por jugar era algo nuevo para mí, y eso me ha hecho crecer. Tener esa competencia dentro del equipo es lo que el Barça me está dando y además estoy rodeada de las mejores, de las que aprendo día a día”.

Respecto a la noticia que apareció hace unos días en un periódico catalán sobre la próxima profesionalización del equipo femenino azulgrana, fue rotunda: “Todo el fútbol femenino estamos luchando por eso, por ir a más y creo que sería un paso muy grande. También sería sacrificado por nuestra parte, entrenar más, dejar a lo mejor los estudios y el trabajo más de lado…, pero sería un paso que nos haría crecer”.