El dinero de Abu Dhabi estaba condicionado al proyecto
IPIC: queda en el aire el patrocinio de 140 millones
La sentencia del TSJM deja también en el aire un patrocinio de más de 140 millones de euros, los que iba a aportar la empresa IPIC, de capital 100% del Gobierno de Abu Dhabi.
La sentencia del TSJM deja también en el aire un patrocinio de más de 140 millones de euros, los que iba a aportar la empresa IPIC, de capital 100% del Gobierno de Abu Dhabi que compró Cepsa en 2011, para la financiación de parte del nuevo Bernabéu. Florentino valoró las obras en más de 400 millones. El acuerdo entre IPIC y Madrid se firmó en octubre de 2014 con una gran puesta en escena (plantilla y cuerpo técnico perfectamente trajeados). Se firmó por cinco años, pero la mayor entrada del dinero estaba supeditada al comienzo de las obras. Madrid e IPIC adelantaron el anuncio porque el inicio de dichas obras ya estaba suspendido cautelarmente por el TSJM (por otra denuncia, la de Ecologistas). Pensaron que el logotipo del fondo de inversión podría comenzar a aparecer en los photocall y en el césped por el módico precio de tres millones de euros anuales. Y tras el inicio de las obras pagaría 20 millones por cada uno de los cinco años firmados hasta los 100 totales, siendo el acuerdo prorrogable dos años más (y revisable).
“Es una alianza poderosa para llevar a cabo uno de nuestros principales desafíos: hacer el mejor estadio del mundo”, dijo Florentino. “Este acuerdo a largo plazo está diseñado para construir el mejor escenario deportivo, comercial y de hostelería...”, añadió su Excelencia Khadem Al Qubaisi, director ejecutivo de IPIC, que habló en nombre de su Alteza, el General y Jeque Mohamed Bin Zayed al Nahyan, Príncipe de Abu Dhabi.
Tal era el compromiso de Florentino con el jeque que, en un acto publicitario, las cámaras captaron como decía en confidencia a Lucía Figar, Consejera de Cultura y Deportes de la CAM: “Sí, sí... Le van a poner IPIC Bernabéu... O si quieren Cepsa Bernabéu... Lo que quieran ellos”. Parece que el último deseo de ‘ellos’ basculaba entre ‘Abu Dhabi’ o ‘Cepsa’.
El Madrid encargó finalmente un proyecto de estadio con techo retráctil al consorcio de los estudios GMP (alemanes) y L35 Ribas, este último, del arquitecto Josep Ribas Folguera, socio culé número 18.195 y afín a Joan Laporta.