ALBACETE 3 - TENERIFE 2
El Albacete remonta y pone en serios problemas a Cervera
Juan Carlos adelantó al Tenerife a los 12 minutos, pero luego los locales desataron su tormenta: doblete de Chumbi y otro de Pulido. Cristo recortó al final.
El Albacete remontó ante el Tenerife (3-2) gracias a un doblete de Chumbi y un gol de Pulido, en un encuentro en el que los locales fallaron un penalti y a los visitantes se les anularon dos tantos por fuera de juego.
Cómo en la última cita casera, el Albacete comenzó el encuentro arrollando a su rival. Portu pudo marcar en el primer minuto en un tiro que se estrelló con el lateral de la red, y en el minuto 6 Chumbi mandó a la cruceta un penalti que había decretado el colegiado De la Fuente Ramos por manos dentro del área de Albizúa, ayer lateral zurdo, quien no protestó la pena máxima.
El lateral remendó el error anterior con una subida por banda en la que recortó a Pulido y puso un centro al segundo palo que se paseó por delante de toda la defensa blanca hasta llegar al debutante Juan Carlos, quien sólo tuvo que empujar ante Dorronsoro para estrenarse con el Tenerife, a los 12 minutos.
Todo el dominio era de un Albacete que llegaba con mucha claridad al área insular pero al que se le nublaba la vista en cuanto tenía al meta Dani Henández enfrente. Keko pudo igualar la contienda al cuarto de hora de juego pero su disparo se marchó muy alto.
Sin embargo, como el partido iba de redenciones, Chumbi tuvo la suya en el minuto 22, en un saque de esquina botado por Samu que cabeceó Paredes y que, el delantero del Albacete, solo en el segundo palo, empujó a la red con su muslo derecho.
El atacante se mostró muy afectado por su fallo anterior y no quiso celebrarlo en señal de disculpa a su afición.
La primera parte acabó en tablas pero, tras el descanso, Chumbi se redimía totalmente del penalti fallado anotando, de cabeza, el 2-1 en un nuevo saque de esquina botado por Samu (minuto 46).
La estrategia le dio un gran rendimiento al equipo de Luis César Sampedro. No obstante, en el minuto cincuenta y nueve, un saque de esquina que sacó Samu para Keko, terminó en un centro de Antoñito que Pulido, de solemne testarazo, introdujo en la meta tinerfeña.
El Tenerife no se amilanó pero notó en exceso las bajas. En el minuto 67 vio como el colegiado De la Fuente Ramos, a instancias de su linier, le anulaba un tanto a Cristo por fuera de juego.
Aunque el propio jugador reducía distancias en un par de minutos más tarde al superar a Dorronsoro, de vaselina, tras un saque de esquina. El encuentro se convirtió entonces en un duelo de idas y venidas en el que el Tenerife vio cómo se le anulaba un segundo gol por fuera de juego. Fue a Carlos Díaz en un falta que botó Juan Carlos.
Los tinerfeñistas intentaron, a la desesperada, colgar balones pero el cuadro de Luis César Sampedro se defendió con orden e intensidad para certificar un segundo triunfo consecutivo que le permite acercarse a los puestos de permanencia de Segunda división.