Un autogol de Juanpe mete al Racing en la zona de descenso

El Girona se impuso en Santander más por los errores del Racing que por el juego desplegado, al adelantarse con un gol en propia puerta de Juanpe en un partido en el que el cuadro catalán pudo haber sentenciado en varias ocasiones en las que los cántabros regalaron balones en su zona de creación.

Un resultado que afianza al Girona en los puestos de cabeza y que impide que el Racing se aleje de la cola de la tabla.

La vuelta a la titularidad de Mamadou Koné ha sido la obligada apuesta de Paco Fernández para sustituir al sancionado Mariano, confiando en que el africano volviera a ser el jugador determinante en ataque que estaba siendo hasta que cayó lesionado.

El Girona, siempre bien colocado y ejerciendo presión en la zona de creación del Racing, dominó desde el principio a un conjunto cántabro que se defendía bien y que tenía en los envíos largos su único recurso ofensivo sin ningún peligro.

En los primeros 20 minutos los locales solo pisaron el área de Becerra en una ocasión, hasta que Koné dispuso de la primera oportunidad en una internada que acabó con disparo ligeramente desviado.

Cuando más espeso estaba el juego el Girona se adelantó sin buscarlo en una desafortunada jugada para el Racing, al despejar Samuel contra el pie de Juanpe un balón fácil que entró mansamente en la portería de un atónito Mario Fernández.

Tras el descanso, el Racing dio un paso adelante y llevó la iniciativa, pero el Girona dispuso de la primera clara ocasión en un nuevo clamoroso fallo de los cántabros. Un mal control de Samuel habilitó a Amagat, que corrió en solitario para encarar a Mario Fernández, que acertó a blocar su disparo.

El Girona, tras los iniciales buenos minutos del Racing, encontró a la contra la forma de hacer daño a los cántabros aprovechando la distancia que había entre sus defensas y centrocampistas. Los racinguistas perdieron muchos balones en ese terreno metiendo en muchos problemas a Mario Fernández, que tuvo más trabajo en este periodo.

Una gran parada a una mano de Mario, a disparo franco de Mata que se plantó solo al borde del área pequeña, fue el reflejo de lo ocurrido en una segunda parte en la que el Racing jugó con más corazón que cabeza y el Girona defendió sin pasar apuros su ventaja, que incluso pudo aumentar.