Athletic - Atlético de Madrid
San Mamés espera a Muniain tras un año 2014 muy sombrío
La afición le exige mayor rendimiento después de que el club hiciera un esfuerzo económico importante para atarle. Es el jugador mejor pagado de la plantilla.
El de hoy es de esos partidos que convierten en pasajera una crisis duradera. Como la de Muniain, que no acaba de acertar con la tecla y seguro que el día 31 cuando coma las uvas pedirá que 2015 le reserve un poco más de fútbol e ímpetu de lo que le ha deparado este año que se va. Llega el campeón de Liga y está ante una de esas citas que le encantan.
El menudo delantero de La Txantrea metió el gol en Liga el curso pasado al Atlético de Madrid en San Mamés. Fue en el minuto seis, tras un gran pase de San José; se cruzó Iker, no la tocó Aduriz y aquel, en una fulgurante aparición por el interior derecho, lanzó una vaselina, que se coló en la meta de Courtois para hacer el 1-0.
Valverde le ha dosificado en los últimos partidos para que llegue fresco. Sus eternas molestias en la espalda no dejan de agobiarle. Muniain tratará de meterse también por dentro para colaborar en la media punta y desequilibrar a la zaga colchonera.
El viernes cumplió 22 años y empieza a ser discutido en Bilbao. La temporada pasada aportó siete goles en Liga y dos en Copa, y éste lleva sólo un par, aunque uno fue crucial: en Nápoles, en la previa de la Champions. El otro se lo hizo al Levante en el primer partido en San Mamés.
La afición le exige mayor rendimiento después de que el club hiciera un esfuerzo económico importante para atarle. Es el jugador mejor pagado de la plantilla. Iker está en plena madurez personal, pues va a tener un hijo.