La oposición pregunta por qué no se identifica a los asesinos

Los grupos políticos de la oposición denunciaron este martes en el Congreso los fallos de los sistemas de prevención en las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado para evitar los incidentes en Madrid Río entre los ultras del Deportivo de la Coruña y del Atlético de Madrid que se saldaron con 21 detenidos y 15 heridos y se preguntaron por qué aún no se ha identificado a los "asesinos" del aficionado de los Riazor Blues Francisco Javier Romero Taboada 'Jimmy'.

En este sentido se pronunciaron en la comparecencia conjunta de los secretarios de Estado de Interior, Francisco Martínez, y para el Deporte, Miguel Cardenal, en las comisiones de Interior y Educación y Deporte de la cámara baja, convocada con carácter urgente a raíz de los incidentes del pasado 30 de noviembre en Madrid Río.

Asimismo, pidieron explicaciones por qué la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no suspendió el partido cuando ya se conocía el fallecimiento del hincha del Deportivo y lamentaron que no hubieran comparecido en el Congreso los ministros de Interior, Jorge Fernández, y de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, tal y como solicitó el Partido Socialista (PSOE).

El diputado del PSOE, Antonio Trevín, reprochó a los dos secretarios del Estado que todas las medidas anunciadas eran aplicables antes de la reyerta mortal del pasado 30 de noviembre. "El problema es que se hizo una valoración baja de riesgo ante la crónica de un conflicto anunciado", enfatizó.

Trevín recordó que son dos aficiones con grupos ultras de ideologías antagónicas con muertos en su historial, que el coordinador de seguridad del Deportivo advirtió de que iban a ir 50 o más miembros de Riazor Blues y que había información de que se iban a encontrar con el Frente Atlético porque habían quedado a las 7.00 para desayunar.

"El mundo ultra, al que tiene que seguir la Policía, estaba en ebullición días antes, Me cuesta mucho creer que la Policía estuviese en la inopia", concluyó. "¿Dónde estaban los antidisturbios y dónde estaba la Jefatura Superior de Policía de Madrid?, preguntó al tiempo que pidió el cese de la delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes, por decir que bastante tiene con controlar los grupos violentos de la capital y estar más dedicada a la carrera por la Alcaldía de Madrid que al trabajo por el que cobra.

Por parte de CiU, el diputado Feliu-Joan Guillaumes dijo que los ultras llevaban semanas citándose por medios telemáticos y no cree verosímil la versión de la Policía de que no tenía información suficiente para haber previsto el riesgo. Su compañera de partido Carme Sayós preguntó a los secretarios de Estado si han tenido "oportunidad de pedirle explicaciones al presidente de la Federación Española de fútbol sobre la suspensión del partido".

BNG: "HA HABIDO UN ASESINATO"

La portavoz del BNG Rosana Pérez afirmó que su grupo "condena cualquier tipo de violencia, venga de donde venga". "Los culpables deben pagar. Mostramos nuestra solidaridad y condolencia con la familia de la persona asesinada. Señorías: ha habido un asesinato, una víctima y uno o varios verdugos que siguen sin aparecer. Llama la atención la agilidad de las fuerzas de seguridad del Estado con la que son capaces identificar todo y después de una semana no ha identificado a los asesinos", lamentó.

La diputada de A Coruña, que declaró que no era "aficionada, abonada ni socia" del Deportivo ni "aficionada al fútbol en general", subrayó que después de las explicaciones de Martínez y Cardenal aún seguía sin saber "si había quedada o no" entre los ultras del Deportivo y Atlético, y las contradicciones entre las declaraciones entre los delegados de Gobierno de Galicia, Santiago Villanueva, y Madrid, Cristina Cifuentes.

"¿Por qué no se suspendió el partido a pesar del asesinato y había gente armada hasta los dientes? ¿Por qué la policía tardó más de 45 minutos en actuar? ¿Por qué asistieron al partido aficionados del Frente Atlético", se cuestionó la diputada del grupo gallego.

El miembro de UpyD Toni Cantó se declaró preocupado porque se hablara "poco de prevención y educación". "Es obvio que, desde ciertos clubes de fútbol, se ha incentivado la connivencia con estos grupos. ¿Qué va a hacer el Gobierno para premiar a los clubes que incentiven el espíritu deportivo?", indicó.

Ricardo Sixto, de Izquierda Plural, dijo que a su grupo no le satisfacían las explicaciones dadas por Cardenal y Martínez y pidió "asumir la responsabilidad a algún nivel más". "Mal estamos si después de los indicios y la información acaban echando la culpa a los clubes de fútbol. Alguna responsabilidad política más deben asumir. Las medidas ya se vienen desarrollando, pero de manera insuficiente. ¿Se va a echar de los estadios definitivamente de los estadios a esta gente?", indicó.

"CONNIVENCIA" CON EL FRENTE ATLÉTICO

El diputado de Amaiur, Mikel Errekondo, reprochó al secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, que en su intervención inicial que no hiciese mención "a los nazis del Frente Atlético, los mismos que mataron a Aitor Zabaleta, cuyo asesinato aún no se ha hecho justicia". Además, denunció la "connivencia de la Policía e Interior" con este tipo de "grupos neonazis".

"¿Dónde están los asesinos?", preguntó el diputado de ERC, Joan Tardá, quien se sumó a la denuncia de Amaiur sobre la connivencia de algunos policías hacia grupos de extrema derecha. Por su parte, el portavoz del PNV, Emilio Olabarría, también manifestó sus dudas acerca de la información con la que contaba Interior.

En su comparecencia ante la Comisión del Interior del Congreso de los Diputados, el secretario de Estado de Seguridad culpó al Deportivo de la Coruña por haber transmitido información "imprecisa" a la Policía, lo que impidió conocer la reyerta entre ultras que, según insistió, fue concertada previamente entre los Riazor Blues y el Frente Atlético.