El triunfo es la gran obsesión local ante un Villarreal cansado

La victoria obsesiona ya a un Córdoba que tardó 40 en años retornar a Primera, y al que de momento está costando 12 jornadas conocer de nuevo una victoria en la máxima categoría. Miroslav Djukic sustituyó al Chapi Ferrer en el banquillo blanquiverde hace cuatro jornadas, y aunque ha mejorado los números del catalán (tres empates, una derrota), tampoco sabe aún lo que es sumar tres puntos de una tacada. En Elche incluso desperdició un 0-2 en la última media hora, y el trauma del triunfo empieza a mirarse con ojos supersticiosos, como de auténtica maldición.

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Esta vez, El Arcanfield tratará de aprovecharse del cansancio europeo y la plaga de lesiones que asola al Villarreal. El equipo amarillo inició con solidez la temporada pero ahora camina dando tumbos, quizá por el montón de futbolistas importantes (Mussacchio y Gio, sobre todo) de los que no ha podido disponer en los últimos encuentros. Con todo, Marcelino ha sabido rescatar a su gente de una racha de cuatro derrotas, y en los últimos tres encuentros volvió a ganar y a empatar dos veces. La última el jueves, cuando tenía la victoria en la mano y se la robó el Borussia M’Gladbach.

Buscando el gol. Tras ganar algo de prestancia atrás, Djukic volverá a encomendarse arriba a la calidad creciente de Fede Cartabia, mientras espera que Ghilas recupere la olfato del gol que tenía al comienzo de su andadura como técnico del Córdoba. Marcelino también busca delanteros fiables. Vietto, que marcó el jueves, y Uche se jugarán en principio una plaza al lado de Gerard Moreno.

La cláusula de Pantic

El Córdoba presentará una baja importante en defensa debido a la ya célebre ‘cláusula del miedo’, que en este caso afectará al serbio Aleksandar Pantic al estar cedido por el Villarreal. El defensa ha jugado en 10 de las 12 jornadas ligueras, nueve de ellas como titular.