SERBIA-ALBANIA
La Federación Serbia: "Los albaneses atacaron a Mitrovic"
En un comunicado, los serbios acusan a los albaneses de "una diversión política bien planeada". "Mitrovic quería seguir. Los albaneses le atacaron".
La Federación Serbia de Fútbol (FSS) culpó este miércoles en un comunicado a Albania de los incidentes del partido de ayer martes en Belgrado entre ambas selecciones y clasificatoria para la Eurocopa de 2016, que tuvo que ser suspendido después del enfrentamiento entre los jugadores de ambos equipos y la invasión de campo de una docena de aficionados locales.
El choque, considerado de alto riesgo por la UEFA, que ya ha abierto expediente, se desarrolló con normalidad hasta el minuto 43, momento en el que un 'dron' sobrevoló el terreno de juego con la bandera de la 'Gran Albania'. En este momento, el jugador serbio Mitrovic se hizo con ella para retirarla del campo y generó la polémica.
Los jugadores de Albania rápido fueron a preguntar al serbio por su gesto, lo que desencadenó una pelea entre futbolistas de ambas selecciones. El árbitro del encuentro, el inglés Martin Atkinson, decidió suspender el partido 30 minutos después, cuando los dos equipos permanecían ya en los vestuarios.
"Fue una diversión política bien planeada y, al final del día, fue el factor clave que provocó que el partido fuese suspendido. Lo único que Mitrovic quería era retirar la bandera para el partido pudiese continuar, pero los jugadores albaneses le atacaron. También deseamos incidir en que los aficionados serbios no desplegaron mensajes ofensivo en ningún momento", señaló la FSS en un comunicado. Rukavina había acusado de provocación a los albaneses.
De todos modos, dejó claro que "no hay excusa para la invasión de campo de algunos individuos". "Después de revisar las grabaciones, la FSS emitirá cargos contra los culpables", añadió la entidad serbia.
Igualmente, la FSS criticó a los jugadores y directivos visitantes y les acusó de ser "cómplices de un plan cuyo único objetivo era forzar que el partido se suspendiese". "El incidente en sí mismo y el comportamiento de los jugadores, entrenadores y 'staff' albaneses no da lugar para dudar que fueron parte de un sincronizado plan para detener el encuentro", añadió el organismo, que consideró "insultante no sólo para la FSS y el pueblo serbio sino que también para la UEFA" que los albaneses se jacten de lo sucedido en las redes sociales.