Deportivo - Real Madrid | La intrahistoria
El jardinero del Deportivo es el mejor aliado de Iker Casillas
Manuel García ha cuidado el césped de Riazor los últimos 16 años y su relación de amigos no se termina en Iker: “Me llevaba bien con Cañizares y lo saludaba siempre".
La pasada temporada, con el Depor en Segunda, el Real Madrid acudió a jugar el Teresa Herrera con la Liga ya iniciada para echar una mano a las arcas blanquiazules. El debate Diego López-Casillas ebullía y en el descanso Manuel García, jardinero de Riazor y admirador de Iker, se acercó al portero para darle ánimos: “Lo vi abatido, tristón y me decidí a ir a hablar con él para darle mi apoyo. Le dije que era el mejor portero del mundo y le pregunté ¿dime uno mejor que tú? No te puedes achicar, y menos ahora que vas a ser padre”.
Un año más tarde, con el Depor ya en Primera, el Real Madrid regresa a A Coruña con Iker titular pero rodeado de más polémica y la historia se repetirá: “No entiendo que le silben en el Bernabéu. Florentino es un gran presidente, un crack, pero hace tiempo que tenía que haber dicho en voz alta: ‘Casillas es patrimonio del Real Madrid’. En el partido lo veré y le daré ánimos de nuevo; tiene todo mi apoyo”.
Manuel incluso cree que Casillas jugará más relajado hoy que cuando le toca hacerlo en casa: “Seguro que estará más cómodo en Riazor que en el Bernabéu. Habrá alguien en la grada que lo increpe, pero lo normal con los rivales del Depor. El problema es que lo que pasa en el Bernabéu lo van a aprovechar las otras aficiones. Me gustaría que volviese el próximo año con el Madrid, pero no creo que suceda”.
Eso sí, el jardinero fiel tiene el corazón dividido en cuanto al resultado del partido: “Soy deportivista y también madridista. Son dos equipos que llevo en el corazón. Es así desde hace muchos años y así seguirá. Ojalá empaten, pero que sea sin goles y divertido”.
Manuel García ha cuidado el césped de Riazor los últimos 16 años y su relación de amigos no se termina en Iker: “Me llevaba bien con Cañizares y lo saludaba siempre. La afición del Depor le tenía manía, pero no me importaba. Tengo un excelente recuerdo de Mauro Silva y Madar, dos grandes personas. Mauro me prometió una camiseta pero se marchó y no se acordó. Al día siguiente llegué a casa y me encontré una camiseta suya firmada. No sé cómo demonios se enteró donde vivía. Fue un detallazo”.