“La afición no debe preocuparse por el futuro de este club”

Arrancó una nueva temporada. Una categoría diferente y un reto diferente. ¿Está obligado el Betis a lograr el ascenso?

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—En el Betis no se contempla otro objetivo que no sea el ascenso. Es una competición larga y difícil, pero estamos absolutamente convencidos de que con rigor, trabajo, sacrificio y, sobre todo, el apoyo incondicional del beticismo lograremos el objetivo.

—Lleva poco tiempo al mando del club, pero ¿cuál fue el peor momento desde que accedió a la presidencia?

—Sin duda alguna la ratificación del descenso.

—¿Qué lo condujo a decidir tomar la presidencia del Betis?

—La petición unánime del administrador judicial y mis compañeros del Consejo de Administración ante la decisión irrevocable de mi antecesor de cesar en el cargo y en el Consejo. Entré aquí para servir desinteresadamente al Betis, totalmente ad honorem, me pidieron que diese un paso más, poniéndome al frente del Consejo y aunque la situación era muy complicada entendí que no podía negarme y colaborar en lo que me fuese posible en mantener la estabilidad económica e institucional que tan difícilmente se habían conseguido con las medidas cautelares que propiciaron la Administración Judicial del paquete accionarial de Farusa.

—¿Cuál es su pasado en relación con el Betis?, ¿Dónde comenzó a vivir el sentimiento verdiblanco?

—Gracias a un tío político mío, que fue directivo del Betis, Pedro García Orta. En los veranos en las playas de Huelva nos adoctrinada e inculcaba el sentimiento verdiblanco. Íbamos a los Trofeos Colombinos y luego veníamos al Benito Villamarín. En 1967 mi padre, secretario judicial, fue destinado a Sevilla y en el colegio me alineé en el lado bético de la clase con otros grandes amigos béticos. La semilla prendió y luego Ferenc Szusza y un Betis de ensueño con la Copa del Rey en el 77 me conquistaron.

—¿Su infancia estuvo ligada al fútbol de algún modo? ¿Cómo apareció su interés por el deporte?

—Como es lógico jugué al fútbol en la infancia, colegio e incluso en la Universidad, pero a nivel de amigos y fuera de competiciones oficiales, alquilando campos y terminando comentando los lances en alguna barra, como la del Tajo, aunque a fuerza de ser franco he de decir que no era ningún crack. Siempre me interesó el deporte, el fútbol y otros, pero practicándolo por diversión y como espectador, creo profundamente en los valores del deporte, y no sólo los físicos.

—Hay una pregunta obligada. ¿La afición debe estar preocupada por el futuro del club?

—La afición está lógica y comprensiblemente enfadada por el descenso de categoría y no hemos perdido ocasión de pedirle disculpas por ello. No obstante, gracias al enorme esfuerzo realizado, la aprobación de un Convenio en el Concurso de Acreedores, haber suscrito un Convenio Singular con la AEAT y venir cumpliendo puntualmente uno y otro, la entidad esta saneada económicamente, pagamos a sus vencimientos todas nuestras obligaciones, comerciales, sociales y fiscales, somos ejemplo en la Comisión de Control Económico de la LFP, lo que no quiere decir que tengamos mucho dinero, pero si seguimos con rigor y seriedad el cumplimiento del plan de viabilidad, no perdiendo la cabeza por acceder a lo que no se puede pagar, no hay que preocuparse por el futuro del Real Betis Balompié.

—Corren malos tiempos.

—Situaciones como las que se están viviendo estos días con algún club no dejaremos que se den en esta casa y seguiremos primando la seriedad y el rigor, lo que nos llevará, más pronto que tarde, a ocupar el lugar que nos corresponde por historia y afición. La evolución de las causas abiertas en los Tribunales por la gestión anterior y sobre el desembolso y titularidad de una buena parte de las acciones de Farusa no deben afectar ni intranquilizar al aficionado, la Justicia resolverá y el Betis seguirá en la senda del saneamiento para, concluido con el pago del convenio con sus acreedores, destinar todos sus recursos a su mayor gloria deportiva.

—Será un año diferente. Muchos consideran que el Betis es el Real Madrid de esta Segunda División.

—Tendremos las mayores audiencias de la división y sufriremos la motivación del contrario, pero debemos pelear cada partido con humildad y sacrificio, si caemos en la tentación de creernos algo más que el contrario y que por ser un histórico del fútbol nacional vamos a recuperar la categoría que nos corresponde, estaríamos en el camino equivocado. Hay que ponerse el mono de trabajo, correr y sufrir más que el contrario, no ir de favorito, y con ello, y el impagable apoyo de la afición, que les verá en muchos campos más que a los locales, conseguiremos el objetivo.

—¿La afición es quizás ahora mismo el gran tesoro del club?

—Hemos superado ya los abonos del año pasado. Tenemos un sistema de gestión de la venta de abonos presencial y online, sin espera alguna para los béticos. La afición del Betis no es sólo el gran tesoro de la entidad, es el Betis mismo, sin su afición, con su idiosincrasia, su desinteresada entrega, su pasión por unos colores y una historia, esto sería una simple Sociedad Anónima Deportiva donde unos profesionales lucharían por obtener el mejor resultado en la competición, pero esto es el Betis y el Betis es su incondicional afición, un patrimonio difícilmente igualado en otros clubes, no sólo en número y fidelidad, sino en sentimiento y pasión. Esta temporada lo estamos viendo. Si consiguiésemos poner a la entidad, en lo social y en lo deportivo, a la altura de su afición, que es por lo que luchamos cada día, entonces el Betis será realmente grande, no sólo para nosotros, que lo es ya y lo ha sido siempre, sino para todos los aficionados.

—¿Cuáles serán las claves a seguir para tratar de volver a tener al Betis en la élite?

—Es esencial seguir cumpliendo el plan de viabilidad, hay equipos que han estado a punto de lograr el ascenso y sin embargo están en trance de desaparecer. Para ello es determinante cumplir el objetivo deportivo, que es el ascenso. Retornaremos a Primera con todos los parámetros económicos en orden y con una gestión del Club ordenada y eficiente. Es un doloroso peaje el que hemos tenido que pagar pero situaciones como la de la temporada pasada no se pueden volver a repetir en el Betis.

—La pasada campaña dejó enormes momentos de tristeza. ¿Qué fue lo que más le sorprendió y lo que más le entristeció?

—Lo que más me sorprendió fue cómo el equipo se fue deshaciendo con el paso de las jornadas, acostumbrándose a perder, olvidó la capacidad de ganar. Nos equivocamos todos, consejo, dirección deportiva, cuerpo técnico y jugadores. Lo que más me entristeció fue ver sufrir a la afición una temporada tan horrible.

—¿En algún momento se arrepintió de tener tanta responsabilidad en el presente y futuro del Betis?

—Cuando uno toma decisiones de la responsabilidad de asumir la presidencia del Betis no se puede parar a pensar si se arrepiente, no se consigue nada echando la vista atrás sobre decisiones ya adoptadas e irreversibles. Todo el tiempo es poco para mirar hacia delante, intentar hacer las cosas lo mejor posible, con seriedad y rigor, lealtad a la entidad, su historia y su afición para retornar a la categoría que le corresponde.

—El club logró retener jugadores importantes. Como el caso de Rubén.

—Rubén Castro ha sido renovado porque es nuestro goleador, es un ídolo para la afición y una garantía anotadora. Hay determinados jugadores como Rubén Castro, Molina, Adán, Xavi, Lolo Reyes, Perquis que son claves en la columna vertebral del equipo y de los que seguimos esperando mucho, así como de los que se han incorporado para esta temporada. Una revolución absoluta de altas y bajas no hubiera sido lo recomendable para afrontar el ascenso.

—En Segunda puede ascender el sexto y quizás no el tercero. ¿Qué opina del sistema?

—Creo que se ha conseguido hacer atractiva la competición hasta el final de la fase regular, además de unos playoff siempre muy emocionantes. También se ha logrado evitar la tentación de arreglos de partidos con muchos equipos que no se jugaban nada a falta de varias jornadas. Ahora está prácticamente todo el campeonato luchando por un objetivo hasta el final.

—¿Domínguez Platas mira al mañana con la duda de un futuro incierto? ¿O el día a día marca su devenir particular en el club?

—El mañana siempre debe ser encarado con optimismo, a pesar de la incertidumbre natural de desconocer el futuro y me planteo esta responsabilidad sin pensar en plazos ni en las decisiones judiciales que puedan alterar el estado de las cosas. En la gestión del club alternamos la atención al qué hacer diario de la entidad pero con una perspectiva enfocada al medio y largo plazo, por eso estamos muy empeñados en concluir la elaboración del Plan Estratégico del Real Betis Balompié, definir qué queremos ser en el futuro, marcarnos unos objetivos y poner todos los medios para lograrlos.

—¿Qué corregiría, deportivamente, sobre el pasado?

—No suelo mirar atrás, salvo para no repetir errores.