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Córdoba | Carlos González

“Soy socio del Madrid, pero espero ganarle y goleando”

Aterrizó en el Córdoba tras comprar el 98% de sus acciones. Con ideas empresariales avanzadas, este dirigente ha devuelto a los blanquiverdes a Primera 42 años después.

“Soy socio del Madrid, pero espero ganarle y goleando”

—¿Cómo le surgió entrar en el Córdoba?

—Lo he explicado muchas veces. Yo entré en el Córdoba porque quería hacer gestión deportiva. Llevo muchos años en el fútbol paralelo, trabajé en el Mundial de fútbol y Córdoba es una ciudad que lo tenía todo para tener un equipo en Primera División. Aparte de que mi abuela es de Córdoba y me crié con mis abuelos. Este era un equipo que podía crecer mucho como así se ha demostrado. Hasta que llegamos nosotros, el Córdoba nunca ha estado en disposición de ascender en los últimos 42 años. Aportamos mucho trabajo. Antiguamente, los presidentes dedicaban pocas horas a los clubes.

—¿Se considera heredero de Rafael Campanero, que ha sido presidente del Córdoba en todas las categorías?

—Es nuestro presidente de honor. Rafael es un hombre que ha dado todo. Luchó y sigue luchando por su equipo. Ha sido el mejor presidente de la historia del Córdoba sin duda alguna (a sus 88 años reside en Fuengirola y está pendiente del club).

—El regreso a Primera, tremendo. Real Madrid-Córdoba. ¿Qué se le viene a la cabeza?

—Deportivamente nada. Es un partido que debíamos jugar. Emocionalmente es muy bonito para la ciudad empezar en Primera División contra el mejor club del mundo, sin duda, y el que más historial tiene. ¡No podíamos empezar mejor! Es lo mejor que le ha podido pasar el Córdoba. ¡Una maravilla!

—Usted es aficionado del Real Madrid.

—¡Soy socio del Real Madrid! Me presenté en las elecciones presidenciales del año 2004 y nos barrió el señor Pérez. Yo soy madridista. No lo voy a negar, pero lo que sí soy de verdad es cordobesista. Si podemos ganar al Real Madrid, mejor; si le podemos ganar por goleada, mucho mejor. Soy del Córdoba. El Córdoba me llena completamente.

—¿Qué nociones tiene del último partido que jugó el Córdoba en Primera en el Santiago Bernabéu ganado por los blancos por 4-1 con gol cordobesista anotado por Cruz Carrascosa?

—En el Córdoba estaban Fermín, Del Bosque, Sanchís… Tengo la noción de lo que he leído. Pero eso es historia. Lo bonito para el Córdoba está por venir, porque en aquella época no existía la repercusión mediática actual a nivel mundial.

—¿Qué sintió ascendiendo a Primera en la última jugada de un partido de infarto en Las Palmas?

—El Rayo en el último segundo se salvó de bajar a Segunda, el Real Madrid se metió en la prórroga de la Champions League en el último segundo, el Sevilla eliminó de la Europa League al Valencia en el último segundo… Me intentaba imaginar lo que puede pasar porque eso es muy difícil que suceda. No puedo explicar lo que pasó. Lo recuerdo como un estallido de bienestar y alegría. Lo primero que se me vino a la cabeza fue la gente de Córdoba. Córdoba lloró de alegría más que nunca en su historia. La gente, enloquecida. Piense que somos una ciudad de 330.000 habitantes. Al día siguiente cuando llegamos había 200.000 en la calle. Eso es brutal. Proporcionalmente, no ha habido un hito que haya movido a tanta gente. Cuando el Real Madrid gana, 500.000 o 600.000. Pero es que Madrid tiene seis millones de habitantes. Es lo más importante que me pasará en mi vida como dirigente deportivio. ¡Seguro!

—¿Es verdad que la famosa invasión de campo del Insular determinó el desenlace final?

—El destino está marcado. Echarle la culpa a lo que ocurrió está muy bien. Eso vende, justifica… Mire usted. Nosotros hemos ganado y perdido partidos en el último minuto a lo largo de toda la temporada. 12 o 13. En Huelva nos empataron en el minuto 95 dos jornadas antes y les dije a mis jugadores: “El fútbol empieza cuando pita el árbitro y termina cuando pita el árbitro”. Da lo mismo el minuto 93 que el 187… Si a nosotros no nos hubieran marcado en el minuto 93 estábamos los primeros destacados.

—Uli Dávila…

—Todos los jugadores han tenido la misma cuota de responsabilidad en el éxito del equipo. Pero Uli Dávila, lo mismo que Iniesta en el Mundial, fueron los visibles de ese éxito. Que no se haya quedado Uli Dávila no ha sido porque el Córdoba no haya querido. Lo hemos intentado hasta la saciedad. Pero las cifras que nos pedían eran imposibles para nosotros.

—El proyecto...

—Es para crecer. Nosotros queremos hacer un club grande. Córdoba es la duodécima ciudad de España. Si hay ciudades más pequeñas en Champions o Europa League ¿Por qué Córdoba no puede llegar un día a eso? Córdoba es la ciudad donde todo el mundo querría ser presidente del equipo. Pero no sólo cordobeses. ¡Toda España! Es un club y una ciudad espectacular.

—¿Ve una Liga bipolar?

—¿Cómo que bipolar? Este año el Atlético ha sido campeón de Liga. En ingresos económicos hay distancias infinitas. El presupuesto del Real Madrid es 20 veces el del Córdoba (los blanquiverdes tendrán entre 28 y 30 millones de euros). Pero es que los grandes equipos se mueven a nivel mundial. Ellos son los números uno. El Real Madrid vende millones de camisetas. El otro día ustedes publicaron que en un solo día habían vendido 342.000 camisetas de James Rodríguez. El Córdoba eso no lo ha conseguido en todos sus 60 años de historia. Vamos a ver. El Real Madrid y el Barcelona son los equipos más solidarios del fútbol español con el resto de los clubes, aunque la gente no se lo crea. Ya nos gustaría que todos fuésemos igual de solidarios que el Real Madrid y el Barcelona. Aunque hay una leyenda por ahí que no. Pero no es verdad. No hay Liga mejor que la española.

—¿Y que le parece esto del partido de interés general?

—Eso no existe. ¿Qué interés general tiene un Málaga-Levante o un Córdoba-Getafe? Interés general es que le interese a todo el mundo. Y el Madrid-Levante sólo le interesa, por mucha gente que lo vea, a los madridistas y a los del Levante. Interés general es la final del Mundial o la Selección española. Pero un Real Madrid-Bayern Múnich, ¿qué interés general tiene? Es que su palabra lo dice. Interés general es para todo el mundo. Y a los culés, ver el Real Madrid-Bayern creo que no les apetece nada.

—¿Y cómo están las cuentas del Córdoba con Hacienda?

—Nosotros tenemos un acuerdo con Hacienda. Nos quedan tres años. Son 1.200.000 euros. Deuda muy bien orientada. Nosotros pagamos, que es lo que deben hacer todos los clubes. Javier Tebas está haciendo las cosas bien en este sentido. Los clubes deben acostumbrarse a que hay que pagar. No queda otra.

—¿Se ha vivido demasiado por encima de nuestras posibilidades?

—Sí. Pero en el fútbol como en cualquier otro habitat o sector. En el fútbol ha habido un problema muy importante. Se lo voy a decir aunque me caiga la mundial. En el fútbol, el 90 por ciento de los presidentes eran constructores. Ahí me quedó. ¿Y por qué lo eran? Esa es la pregunta que le hago a la gente. Ahora parece que hay otro tipo de gestor en el fútbol que está haciendo las cosas mejor. Mucho mejor. Ya no dependemos de que nos recalifiquen nada.

—¿Cómo marcha el tema de los abonados?

—¡Brutal! Hemos duplicado los que teníamos. Tener 9.000 abonados ya era mucho. Y ahora acabaremos en 18.000 abonados. ¡Para un campo donde caben 21.000!

—Sus campañas de márketing, famoso vídeo al Rey don Juan Carlos o lo de Artur Mas, han sido memorables...

—Buscamos la relevancia que deportivamente no había conseguido el Córdoba en tantos años. ¿Me pregunta si yo, hoy, haría otra campaña? No. Pero ese momento era lo que teníamos que hacer. Fue contra la Real Sociedad y contra el Barcelona, aquello del Rey y de Artur Mas (la eliminatoria de Copa contra el Barcelona con recordada ironía sobre el presidente de la Generalitat).

—¿Le dieron algún tirón de orejas por aquello?

—No. Artur Mas fue a verme. Del Rey Juan Carlos no recibimos contestación. Artur estuvo muy amable. Me dijo que venía a verme para que le conociera y así poder hablar de él, mejor o peor, pero con conocimiento. Y lo le dije que él en España hacía todo lo posible porque todos le conociéramos y que no hacía falta que se hubiese molestado. Y ahí quedó la anécdota. Dijo que el Córdoba era un equipo que admiraba y que la ciudad le gustaba mucho.

—¿Quién fue su ídolo futbolístico?

—Butragueño. Lo tiene todo. Un magnífico jugador de fútbol que si estuviese ahora estaría entre los tres grandes del fútbol mundial. Magnífica persona. Un tío formado, educado, con una carrera universitaria, con idiomas. Fue el primero de los deportistas que este país ha exportado. Como Rafa Nadal, Pau Gasol, Fernando Alonso… Es un diez como persona y es la cara visible del madridismo. Y Florentino, con muy buen criterio, lo utiliza en ese sentido.

—¿Cuál es su modelo de gestión?

—Me gusta el modelo económico del Real Madrid y el de gestión del Sevilla, cómo venden para seguir creciendo.

—Supongo que los más viejos del lugar le habrán nombrado a Juanín como mejor jugador del Córdoba de todos los tiempos.

—Juanín es el máximo exponente. La Ciudad Deportiva que hagamos, y tenemos cerca ese sueño, tendrá el nombre de Juanín.

—¿Chapi Ferrer?

—Llegará lejos. Lo tiene todo. Yo he tenido a Paco Jémez de entrenador. Pues yo le digo que Chapi es bastante mejor que Paco Jémez.

—El Córdoba ya ha realizado varias incorporaciones, las últimas son Fausto Rossi, Íñigo López y Pantic. ¿Cuantos quedan por cerrar?

—Nos quedaría otro más. Estamos esperando a que se libere de sus clubes. Cuando lo consiga, se viene. Fichajes, más dos, que son Gunino y López Garai, que no tenían contrato y les hemos renovado. Mantenemos a nuestros niños que nos han ascendido.