Grupo C | Colombia
Ibarbo :“No hay triunfalismos, este torneo son siete finales”
Colombia ya está clasificada para octavos de final del Mundial y afronta el partido de mañana con la tranquilidad de que parece difícil que se le escape la primera plaza.
Colombia es una de las selecciones felices de este Mundial. Ya está clasificada para octavos y afronta el partido de mañana con la tranquilidad de que parece difícil que se le escape la primera plaza. Aún así, Pékerman no quiere que su equipo se relaje ni se confíe lo más mínimo. El entrenamiento de ayer, antes de volar por la tarde hasta Cuiabá, fue a puerta cerrada y ya se especula con las posibles novedades del once que se enfrente a Japón.
Parece probable la entrada de Valdés, que sustituiría al veterano Yepes, con molestias musculares pero que ayer trabajó con normalidad. Además, Mejía o Guarín darán descanso a La Roca Sánchez, apercibido de sanción. Sin embargo, la gran novedad del once, la que más expectación está levantando en el país, es la de Faryd Mondragón, que a sus 43 años cumplidos el sábado podría batir el récord de ser el futbolista más veterano en jugar en una Copa del Mundo. Hasta un par de horas antes del partido no se sabrá, aunque es posible que Pékerman haga una excepción y confirme hoy la rotación en la portería.
En lo deportivo, la confianza de los cafeteros es máxima, pero los jugadores son conscientes de que la exigencia irá en aumento. “Hay cosas que debemos ir corrigiendo en los entrenamientos. En este equipo no hay triunfalismo. En un Mundial el campeón juega siete partidos y cada uno de ellos es una final en la que no se puede fallar”, resumió Ibarbo.
Con buen ánimo, la expedición de Colombia durmió ayer ya en Cuiabá, tras el vuelo chárter que les desplazó desde Cotia. Las cuentan le salen al equipo, que no se sale del guión: todos los partidos son finales.