Barcelona
Luis Enrique hará 20.000 km menos que el Tata Martino
La gran diferencia respecto al curso pasado es que entonces, solo con la gira asiática , ya recorrieron 20.000 kilómetros. Cobra importancia la preparación física.
El Barcelona no quiere tropezar dos veces en la misma piedra. Si hace un año alcanzó el arranque de Liga tras una pretemporada donde los ingresos primaron sobre la preparación física (y lo pagó), Luis Enrique se ha marcado como objetivo no caer en la trampa en que sucumbió Martino, su predecesor. Es por ello que, a falta de concretar una posible estadía entre el 19 de julio y el 2 de agosto, el Barça recorrerá durante su puesta a punto 20.000 kilómetros menos que el pasado verano.
Cuatro son los viajes previstos por el nuevo técnico, todos en avión y de ida y vuelta a Barcelona. El primer partido del Barça tendrá lugar en Huelva, el 19 de julio, ante el Recreativo, lo que supondrá 1.816 kilómetros. El 2 de agosto, se medirán al Niza en dicha localidad; 980 kilómetros más. Tres días después, llegarán a Ginebra para jugar ante el Nápoles (1.246 kilómetros). Y, finalmente, el trayecto más largo: 5.212 kilómetros de ida y vuelta entre la Ciudad Condal y Helsinki, en este caso ante el equipo de la capital de Finlandia. En total, 9.254 kilómetros.
La gran diferencia respecto al curso pasado es que entonces, solo con la gira asiática —que les llevó por Israel, Palestina, Tailandia y Kuala Lumpur—, ya recorrieron 20.000 kilómetros. Además, de allí volvieron únicamente una semana antes de la Liga. Ahora, tras el último viaje quedarán 15 días para prepararla, sin Supercopa y solo con el Gamper (el día 18, en casa) de por medio.
Los internaciones regresarán antes y mejor
La prematura eliminación de España en la Copa del Mundo ha supuesto una ayuda extra para Luis Enrique en la pretemporada. Cinco de los siete internacionales que el Barça tenía en la Selección (Xavi y Cesc ya no regresarán) se incorporarán a la preparación mucho antes que si hubieran llegado lejos en la cita mundialista. Seguramente se sumarán a la plantilla culé alrededor del 23 de julio, apenas una semana después del inicio de los entrenamientos. El año pasado, y tras alcanzar la final de la Copa Confederaciones, se incorporaron el 29 de julio, cuando el Barcelona ya llevaba dos semanas trabajando, y con un doble añadido: la Liga empezaba una semana antes que este año y no tuvieron estadía, sino la molesta gira asiática.