Brasil 2014
La violencia contra el Mundial toma las calles de Curitiba
14 detenidos, balance de las protestas en la sede de España. En Río de Janeiro un policía se vio obligado a disparar tres veces al aire en una manifestación.
Curitiba se estrenó en el Mundial con el pie izquierdo. Y no fue sólo por el Irán-Nigeria, único empate y partido sin goles del campeonato. La sede de España en Brasil durante el torneo vivió un lunes negro de violencia, cuando 14 personas fueron detenidas tras una confrontación entre manifestantes y la policía. En otros dos incidentes, tres personas murieron y dos resultaron heridas por disparos.
La primera confusión ocurrió al principio de la tarde, cuando un grupo de 300 personas que marchaba en contra del Mundial intentó romper la barrera de los antidisturbios que les impedía de acercarse al estadio Arena da Baixada, donde fue el partido. Frustrados, los manifestantes decidieron entonces asaltar locales comerciales próximos, rompiendo escaparates y agencias bancarias. Un grupo tiró y prendió fuego a unos contenedores en medio de una de las vías de acceso al estadio, impidiendo el paso durante cerca de media hora.
Después del partido, un hombre fue tiroteado en el pecho tras un principio de pelea en un centro comercial de la ciudad. En un barrio periférico, de camino al aeropuerto, cuatro hombres fueron ametrallados en un incidente que, según la policía brasileña, tiene conexión con bandas callejeras. Tres murieron y uno está hospitalizado en estado grave.
En Río de Janeiro, un policía de paisano sacó una pistola contra un grupo de 200 manifestantes que intentaban cerrar una calle que da acceso a Maracaná. El agente bajó de un coche, amenazó a periodistas y disparó tres veces al aire. “Aléjense de mí o alguien va salir herido de aquí”, ordenaba el policía con el arma en la mano.