Ghana fue mejor pero le hundió la falta de concentración

Se cumplió la venganza. Ghana había apeado a EE UU de los dos últimos Mundiales (2010 en octavos y 2006 en fase de grupos) y a la tercera los norteamericanos tuvieron su vendetta. Vencieron al conjunto africano (1-2) gracias a un madrugador tanto de Dempsey y al cabezazo de Brooks cuando el partido agonizaba.

Sólo habían pasado 30 segundos cuanto EE UU se puso por delante. Jugada pícara, pues todo nació de un saque de banda. Dempsey tocó, acompañó la jugada y, tras un recorte, definió abajo ante la estirada de Dauda.

Muy pronto se le ponían las cosas de cara para los hombres de Klinsmann, que siguieron buscando el segundo. Y casi lo encontró Altidore antes de irse lesionado. Sin embargo, el partido empezó a cambiar. Ghana dio un paso al frente, liderada por Gyan, y empezó a llegar a las inmediaciones de Howard. Pero EE UU cuenta con un porterazo y el meta del Everton fue sacando una a una las acometidas rivales.

Hasta que el punta del Al Ain se encontró con un escondido ayer Ayew. Taconazo para que el mayor de los hermanos pusiera el empate. Parecía que todo iba a acabar así, pero apareció la cabeza de Brooks para hacer el definitivo 1-2. Ghana mereció más y ahora tiene casi imposible seguir vivo.