GRUPO B | ESPAÑA
Cumbre española en Curitiba como terapia al estado de shock
Vicente del Bosque se reunió con Iker Casillas y Xavi antes del entrenamiento de la Selección. Análisis : el desplome físico colectivo es lo que más preocupa en España.
Iker Casillas y Vicente del Bosque mantuvieron ayer una charla sobre el césped del campo de entrenamiento de España en Curitiba. A la vista de los periodistas y mientras el resto de jugadores se ejercitaban, seleccionador y capitán repasaron el partido ante Holanda. La conversación se produjo después de que Del Bosque revelara en rueda de prensa que Casillas se autoinculpó de la derrota, “aunque culpables fuimos todos”. En el final de la charla participó el otro peso pesado de la Selección, Xavi, también criticado por su rendimiento en el choque ante los holandeses.
El entrenamiento de la Selección fue suave. Los titulares únicamente hicieron ejercicios de recuperación y se retiraron después de media hora. El resto realizó prácticas de aperturas a banda, centros y remates.
Toda la expedición de la Selección en Brasil, con futbolistas, técnicos, directivos y enviados especiales, sigue en estado de shock. Los jugadores dieron la cara y entonaron el mea culpa, igual que Del Bosque, por el desastre de “dimensiones bíblicas”, según se escuchó en el autocar de la prensa, que fue la mayor goleada recibida por La Roja desde 1950. Los propios enviados especiales se bloquearon al intentar analizar la paliza que pegó Holanda a España. Todos apuntaban como una de las claves la ocasión de Silva que tuvo el 2-0 en sus botas en la jugada anterior al empate de Van Persie (su gol se puede considerar uno de los mejores en la historia de los Mundiales). Algunos aseguraban que fue el cambio de Xabi Alonso, que estaba mejor que Busquets, el que desmoronó al equipo. Otros indicaban como factor decisivo la mala actuación de Casillas, Ramos, Piqué o Alba. Hasta se llegó a apuntar a Torres por fallar la clara ocasión que tuvo para el 2-5 (se explicaba en clave de que podía costar caro para la diferencia de goles).
El bajón físico de todos los jugadores en la segunda parte reabrió el debate sobre el error en la elección de la sede de concentración. Pasar del clima fresco y lluvioso de Curitiba a la humedad y el calor de Salvador de Bahía pudo ser una de las claves para que de repente se vinieran abajo todos los internacionales. Es chocante que, de las 32 selecciones que compiten en el Mundial de Brasil, treinta hayan elegido entrenarse y concentrarse al nivel del mar y sólo dos, Ecuador y España, hayan escogido lo contrario.
La duda estriba en si Del Bosque debe hacer una revolución en el once para enfrentarse a Chile. Los más atrevidos cuestionan incluso la continuidad de Casillas en la titularidad, aunque ninguno cree que el seleccionador siente al capitán. Esa corriente inmovilista dice que Del Bosque no hará ningún cambio ante Chile para no señalar a ningún futbolista.
A lo grande. La tercera derrota más abultada en la historia de la Selección ha creado un gran revuelo fuera y dentro de la concentración en Cajú, la ciudad deportiva del Atlético Paranaense en Curitiba. La Roja perdió a lo grande, como les pasó a grandes deportistas como Merck o Miguel Indurain, que después de ganarlo todo tuvieron unas etapas que les retrató e indico su retirada.
Las dudas surgen y lo análisis resultadistas hacen ver todo mucho más negro. Salir del estado de shock no será sencillo, pero según se aproxime el partido de Chile seguro que volverá el optimismo.