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España 2 - El Salvador 0

“¡El primero es tanto de Diego! ¡Es un gol clarísimo de Diego!”

La familia Costa abre sus puertas a AS en Lagarto. Diego copa la atención cuando la pelota echa a rodar. “Nos ha dicho que está recuperado", confiesa el padre.

Lagarto
VIBRARON. La familia de Diego Costa al completo siguió con atención la victoria de La Roja en el amistoso de anoche frente a El Salvador.
VIBRARON. La familia de Diego Costa al completo siguió con atención la victoria de La Roja en el amistoso de anoche frente a El Salvador. Aritz GabilondoDiario AS

Josileide, la madre, sufre en silencio. Está sentada en la última fila, detrás del resto, detrás del padre, José, que tampoco articula palabra más allá de algún monosílabo cuando Diego Costa no llega a un balón largo. En Lagarto, al nordeste de Brasil, hay una casa que vibra y sufre con la Selección. Hablan y debaten en portugués, pero sienten y padecen en español. Su hijo, su hermano, su amigo, Diego Costa, copa la atención cuando la pelota echa a rodar. “Nos ha dicho que está recuperado; vamos a confiar en que no pase nada”, confiesa el padre de Diego con la misma mirada exacta que su hijo. Ese es el miedo que rodea al salón de los Costa en Lagarto, un salón lleno de camisetas de La Roja con el 19 de Diego a la espalda.

La abuela, Ana María, tampoco se lo pierde. Observa y analiza con ojos de abuela, los mejores que puedan mirar a Diego desde la distancia. Jair, el hermano, calcado al delantero de la Selección, saca unas botellas de Skol y las ofrece entre los invitados. Hace calor. Entra aire caliente desde fuera. La cerveza refresca. Rangel, Reinan, Evaldo, Eduardo, Henrique... Todos quieren.

El papel crucial de Diego Costa en este equipo tarda dos minutos en aparecer. “La primera pelota que toca la convierte en un penalti”, recalca Eduardo. Todos esperan que lo tire Diego, pero es Fàbregas y lo lanza a las nubes. Suspiros. Y más suspiros se suceden cuando España lo intenta, pero sin éxito. “Esos movimientos de Diego le vienen muy bien a España. El gol va a llegar seguro”, tranquiliza Jair.

Y vaya que si llega. Un grito se escucha en todo Lagarto cuando Villa y Diego Costa empujan al alimón el primer tanto del encuentro. “¡Es de Diego! ¡Es de Diego!”, grita con orgullo Talita, la hermana pequeña, nerviosa como ningún otro de la familia. Da igual de quién sea, ellos lo celebran de la misma manera. Y sonríen y se abrazan. Y se alegran por su Diego. “Está listo para el Mundial”, resumen al final. Eso es mucho, familia. Es todo. Gracias por compartirlo.

Se desplazarán hasta Salvador

La familia de Diego Costa se desplazará hasta Salvador de Bahía, que se encuentra a unos 350 kilómetros de su localidad natal (Lagarto), para presenciar el partido contra Holanda en el debut de la Selección en este Mundial. La familia Costa no siempre tiene la oportunidad de ver a su hijo jugar tan cerca de casa.

La Taberna de Nilma, llena

Como siempre que juega Diego Costa, sea con el Atlético o en la Selección, la Taberna de Nilma se llenó. Este es el lugar habitual de reunión de los aficionados al fútbol y el ambiente que se vivió ayer fue muy bueno. Vibraron con la Selección y celebraron el primero de los goles a El Salvador como si Costa lo hubiera marcado.