Barcelona - Atlético de Madrid
Ufarte: “¿Las Ligas en Cataluña? Yo, en las finales me crecía”
Ufarte fue uno de los héroes de la quinta y sexta Liga del Atleti, en las campañas 65-66 y 69-70, respectivamente. Marcó en el partido decisivo en los dos cursos.
Usted marcó en las dos Ligas que el Atleti ganó en Cataluña: ante el Espanyol y el Sabadell. ¿Cómo recuerda esos partidos?
—Fueron goles muy importantes porque nos dieron el campeonato. En la primera Liga era mi segundo año y en el primero ya había ganado la Copa. Hubo una final en Sarriá con el Espanyol y tuve la suerte de darle esa alegría a la afición del Atleti, que siempre me han tratado con mucho cariño y había que devolverles algo de ese afecto. Yo estaba muy mentalizado para ser campeón. Salió un gran partido, teníamos un gran equipo y tuve la suerte de marcar el gol.
—¿Y de la Cruz Alta?
—En Sabadell el partido estuvo muy difícil hasta el segundo tiempo y metí el gol que nos daba el campeonato. Luego lo redondeó Calleja. La sexta Liga nos dio una alegría grandísima por ver esa afición del Atleti tan buena y que nos trató tan bien. Cuando llegamos a la estación todo eran abrazos. Le tengo mucho cariño a la afición del Atleti.
—En ambos partidos muchos aficionados rojiblancos fueron a Cataluña para cantar el alirón junto a ustedes, ¿cómo recuerda ese ambiente?
—Hacía bastante tiempo que el Atleti no era campeón y era una alegría muy grande para ellos.
—A usted como héroe de esas dos Ligas (quinta y sexta del Atleti) casi le sacarían en volandas de Sarriá o la Cruz Alta...
—El equipo era muy bueno y yo en las finales siempre me crecía. Yo ya había sido campeón en Brasil con el Flamengo, un club al que le debo todo, con el que me crié desde los juveniles, donde jugué con gente que después fue campeona del Mundo... Era una época brillante de Brasil. En el Atleti me consolidé. He sido muy feliz en este club por la gente y por el cariño que me tenían en el Calderón y Metropolitano.
—¿Ve posible que se repita la historia y que el Atleti vuelva a ganar una Liga en Cataluña?
—De momento tenemos la tradición de haber ganado el título allí dos veces... El equipo está bien y fuerte, pero el Barcelona en su campo y con su afición… Va a ser un partido muy difícil. Yo confío en este equipo, que está dando un rendimiento alto. No hay nada imposible. Son dos equipos parejos. Tal vez el Atleti ha bajado un poco en los últimos partidos, pero el Barcelona también lo ha bajado. Pero es un partido que el Atlético puede ganar.
—¿Se parece su equipo al actual Atleti? ¿Cuál es mejor?
—En el primer campeonato contra el Espanyol éramos un equipo muy ofensivo, con cinco delanteros. Cosa que hoy en día es improbable. En la Liga ante el Sabadell sólo jugábamos Gárate y yo arriba. Era un equipo muy parecido a este, con bastante contragolpe. Gárate y yo éramos muy rápidos y nos entendíamos muy bien.
—¿Con qué jugador del actual Atleti se identifica más?
—Hoy los extremos en el fútbol casi no existen. Yo el jugador más grande que he visto en mi vida en esa posición fue Garrincha, con el que tuve la suerte de coincidir en la selección carioca. Y, además, tengo una anécdota muy bonita con él.
—Cuente.
—Teníamos un partido y él dijo que le dolía un poco la rodilla. Dijo que le rezaran porque él creía más en las que rezan que en los médicos. Me dijo que yo había hecho un gran campeonato y que me merecía jugar ese partido. Y debuté en una selección que después fue campeona el Mundo en el 70. Para mí, un chico de Pontevedra que tras tres años en Brasil estaba en el Flamengo, era una cosa sensacional… Mi madre tenía muchas ganas de venir a España, yo quería jugar con la selección española y con el trato tan maravilloso que nos dieron en Brasil me costó. Le dije al presidente del Flamengo que me tenía que vender. Le costó mucho, pero le convencí.