Ángel sella la permanencia del Levante y complica al Elche

La relación amor-odio de Ángel y la afición del Elche va camino de ser interminable. Después de redimirse el año pasado con uno de los goles del ascenso en Villarreal, el tinerfeño le robó al Elche la media permanencia que había atado Boakye tras un buen movimiento de killer. El tanto de Ángel habría quedado en anécdota si el Elche hubiera acertado en las claras ocasiones que tuvo en la segunda mitad. Garry Rodrigues, tan rápido como alocado, tan efervescente como impreciso las tuvo de todos los colores. Pero una de sus características no es un buen golpeo de balón. Y el Elche lo pagó caro

De entrada, Levante y Elche fueron dos púgiles desbocados. Ni rastro de las salidas contemplativas que franjiverdes y granotas han mostrado en algunos partidos, a lo largo de la temporada. Boakye golpeó primero, detuvo Keylor. Igualmente Ángel, paró su amigo Manu. Hasta en faltas con peligro empataron (Damián y Diop). Pero lo dejaron todo para la segunda mitad. Ahí el Elche empujó y jugó uno de sus mejores partidos, ofensivamente hablando, de la Liga, pero por desgracia las mejores ocasiones le cayeron a los pies de Garry Rodrigues, un tipo que demostró no ser capaz de embocar un balón ni en el Arco del Triunfo. La primera llegó tras una buena combinación con Boakye que mandó fuera con Keylor ya batido. Héctor Rodas amenazó de cabeza pero fue Boakye quien quiso convertirse en el héroe de la permanencia con un golazo a la media vuelta. Pero Ángel tenía otros planes. El exfranjiverde culminó su fenomenal partido con un gol, tras un doble remate, que hizo mucho daño a sus ex. No lo celebró pero daba igual porque instaló la angustia en el cuerpo a todo Elche. Los franjiverdes aún tuvieron una más. Y cómo no Garry la mandó lejos de la portería tras una gran maniobra de Coro. Ahí se acabó la paciencia de la afición. Y las opciones del Elche