El Martínez Valero contra el último empujón de los béticos

La permanencia se aprieta. Todo el mundo gana por debajo y quien se creía cerca de la salvación aún sufrirá y quien se veía en Segunda, aún tendrá opciones. Eso precisamente es lo que le sucede a Elche y Betis. Los ilicitanos, que con el triunfo ante el Celta se veían en una zona templada, 15 días después se ven obligados a ganar al Betis o podría aparecer la angustia al quedarse sólo un punto por encima del descenso. El Betis, que llega en éxtasis europeo tras vencer en el derbi del Pizjuán, podría quedarse a siete puntos de la salvación si gana esta mañana, algo inimaginable hace algunas jornadas.

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Hace tiempo que este partido se veía en la lejanía como importante, pero los distintos resultados, propios y ajenos, le han dado a estos tres untos un valor todavía mayor. El Elche lleva toda la temporada afianzando su posición (siempre unos cuantos puntos por encima del descenso) por lo conseguido en el Martínez Valero. En 2014 no ha perdido en casa y acumula diez de los últimos 12 puntos disputados ante su público. Y así quiere seguir. La grada será una caldera y podría registrar la mejor entrada de la temporada. Hay aficiones que ganan puntos y la del Elche quiere pasar a formar parte de ese grupo.

Por el contrario, el Betis ha sido una calamidad fuera de casa, donde aún no ha ganado. Pero éste es otro Betis. Quizá Calderón haya llegado demasiado tarde pero seguro que de aquí al final el Betis se lleva por delante a más de uno. Sobre todo, después de la explosión anímica que supuso el triunfo en el derbi europeo del pasado jueves.

Regreso. Otro aliciente es el regreso de Jorge Molina al Martínez Valero. El Betis le fichó del Elche por 1,6 millones más 0,5 por el ascenso pero el club verdiblanco sólo pagó 400.000 euros y el resto lo apuntó en la barra de hielo del concurso de acreedores. Eso siempre escoció en Elche. La afición lo recordará y Molina querrá marcar. Todo acicate es bueno para una nueva final en el Martínez Valero.

Escribá recupera a Toño, Sapunaru y Garry, que tendrá minutos

n La plantilla del Elche realizó ayer su última sesión de trabajo antes de concentrarse en el hotel Milenio. El portero Toño demostró que está perfectamente recuperado de su lesión y hoy volverá a la convocatoria de Fran Escribá. En principio estará en el banquillo. Quien podría pasar de la grada al once directamente es Sapunaru. Escribá ha destacado el buen momento de forma por el que atraviesa el rumano y le ha cuestionado el puesto a Damián Suárez. Garry Rodrigues volverá a tener minutos esta mañana. Se espera la mejor entrada de la temporada en el Martínez Valero por la importancia del partido y el horario. La afición mostrará un mosaico cuando ambos equipos salten al terreno de juego. También habrá muchos aficionados béticos en las gradas. Al menos medio millar. La mayoría estará en la curva del anillo superior, aunque muchos se mezclarán con la afición local.