BARCELONA
El juez Ruz admite la querella contra Rosell por el caso Neymar
El juez atiende a la petición de la fiscalía y también a las palabras del presidente culé. Juzgará si hubo "simulación contractual", aunque no ve "urgente" llamar a RosellSochaux-PSG: Copa de Francia 2018
El caso Neymar, que al principio parecía la pataleta de un socio desairado por la prepotencia y la burocracia de un club y su presidente ya es un escándalo en toda regla. Ayer por la mañana, el Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional de Madrid que preside Pablo Rafael Ruz Gutiérrez admitió a trámite la querella por supuesto delito de apropiación indebida en la modalidad de distracción que presentó el socio del Barça, Jordi Cases Guarc contra Alexandre Rosell i Feliu, presidente de la entidad azulgrana.
En su Auto, el juez explica que tras examinar la documentación presentada por los querellantes ”se desprenden elementos suficientes para investigar los hechos y se entiende que existen indicios de que se produjo una simulación de contratos”.
Esto quiere decir que el Barça supuestamente pagó una morterada al padre de Neymar en un concepto que nada tenía que ver con el contrato. Como explica el juez, “se produce una mutación de lo que era un contrato por el que se transferían los derechos económicos sobre los derechos federativos de N&N (empresa del padre de Neymar) al FCB por 40 millones de euros en una cláusula de penalización del mismo, mientras que por otro, resultaría también que la cantidad abonada como préstamo en 2011 constituía más bien una garantía del futuro contrato. Cuestiones ambas que podrían apuntar a una simulación contractual”.
Es decir, que el Barça firmó un contrato con la empresa del padre de Neymar en la que el club blaugrana y el jugador acordaban que cuando quedase libre, firmaría por el Barça por 40 millones, 10 de los cuales se adelantaron en forma de préstamo. Si cualquiera de las partes rompía el contrato, se pagaría una indemnización de 40 millones. El acuerdo lo rompió el Barça al ficharle antes de que quedase libre. Ahora queda por ver si ese dinero se contabiliza como salario adelantado o como indemnización. Cuestión bastante importante teniendo en cuenta que las Haciendas Brasileña y la Española están atentas al resultado.
Inhibición. El Caso Neymar se complica a cada día que pasa y para hoy se espera que el Barcelona eleve un escrito a la Audiencia en el que pedirá al juez Ruz que se inhiba de este caso a causa de un conflicto de competencias. Formalmente, Sandro Rosell (que es el objeto de la querella, no el Barcelona) solicitará que se traslade a un juzgado de la capital catalana aduciendo que el contrato en cuestión se firmó en España y que por tanto, no es un supuesto delito internacional. En el fondo, la cuestión es mucho más simple y se resume en que el juez Pablo Ruz es simpatizante (y puede que socio) del Real Madrid.
De hecho, desde el club blaugrana se sospecha que detrás de la actuación judicial se encuentra la mano de Florentino Pérez. Artículos en este sentido se podían leer ayer en la prensa catalana donde además de señalar al presidente del Madrid como instigador del proceso se hacía especial mención en la condición de madridista del magistrado titular del juzgado número cinco de la Audiencia.
De confirmarse la petición de inhabilitación se consumaría un giro copernicano en la estrategia de defensa del presidente del Barcelona, que el lunes solicitó al juez que le llamara a declarar para así poderse saltar la confidencialidad (otra falsedad como demostró ayer El Periódico) y que ayer ya no quería saber nada de este magistrado.
Ruz considera en su auto que no hay “urgencia” de llamar a declarar a Rosell ya que antes quiere examinar todos los documentos, contratos y además tomar testimonio a los empleados de la consultora Deloitte que auditaron las cuentas del club.
Antes de interrogar a Rosell, Ruz quiere saber por qué se pagaron 7,9 millones para tener opciones preferentes por tres jugadores del Santos (dos de ellos acaban contrato en cinco meses): por qué el Santos cobra el triple por amistosos que el resto de equipos del mundo (incluido Barça); por qué el padre de Neymar tiene dos contratos privados con el club para buscar inversores y promesas si vive en Barcelona y por qué ignoraron a un socio. La pataleta, ya es escándalo.