Balón de oro | Reacción en Barcelona
El Barcelona felicita al crack portugués; la opinión se rebela
Contraste entre la reacción oficial y la mediática. Por lo que se extrae de los análisis catalanes, el justo ganador del certamen tenía que haber sido Ribéry.
La resaca en Barcelona al Balón de Oro concedido a Cristiano Ronaldo revela un extremo contraste entre la reacción oficial del club (el Barça) y del principal implicado en la votación (Messi) respecto a la reacción de la opinión publicada. Si bien la actuación del Barcelona y de Messi, en contraste con la del Real Madrid y el propio Cristiano Ronaldo cuando el resultado les fue adverso, fue ejemplar y un elogiable ejemplo de Fair Play, la prensa de Barcelona no se tomó tan bien el resultado de la votación.
El diario Sport hablaba claramente en portada de que “Esta vez no ganó el mejor” mientras que en páginas interiores José María Casanovas titulaba su editorial “todo estaba pasteleado; Blatter corona a Ronaldo”.
En Mundo Deportivo es destacable, por la trascendencia que tiene, el artículo de Francesc Aguilar, subdirector del diario y además corresponsal de France Football en España y por tanto el único periodista español que tiene derecho a incidir directamente en la votación. Su punto de vista, contrario a la votación, huye de forofismos.
Aguilar, en un escrito muy fundamentado titulado “Un FIFA Balón de Oro que deja dudas” expresa su añoranza respecto al antiguo sistema de votación y realiza desde dentro una valiente crítica respecto al funcionamiento del sorteo una vez que la FIFA se ha hecho con el control del galardón.
No se corta Aguilar en calificar como “sospechosa” la votación y reivindica al galardón del UEFA Award recién instaurado por Platini como el más digno heredero de la tradición del Antiguo Balón de Oro.
Siguiendo con la línea argumental del sistema de votación de antaño, se destacaba mucho en la prensa catalana que si la votación hubiese tenido en cuenta únicamente a los periodistas, hubiese sido Ribéry el vencedor.
A favor de Franck. Por lo que se extrae de los análisis catalanes, el justo ganador del certamen tenía que haber sido Ribéry. Una cosa es que se considere a Messi el mejor del mundo y otra muy diferente que se le considere como el mejor del último año natural, en el que las lesiones han mermado su capacidad.
Pocos son los que regatean elogios a Cristiano, pero se considera que los éxitos colectivos a los que contribuyó el francés con su equipo tendrían que haber pesado más que la exuberancia individual del luso del Madrid.
Ante este estado de opinión, posiblemente cobre más valor la inmediata y deportiva reacción de todos los actores barcelonistas, desde el club como institución, pasando por el presidente del Rosell a título individual y al propio Messi a los que no dolieron prendas en felicitar al vencedor.