LEVANTE 1 - MÁLAGA 0
Barral le saca una cabeza al Málaga
El Levante defendió con uñas y dientes el gol del delantero y llega al ecuador con 23 puntos. El Málaga chocó con Keylor Navas y acaba la primera vuelta con 20 puntos.
Pura vida, como diría uno de los protagonistas (Keylor Navas) del partido, es lo que suponen estos tres puntos para un Levante que necesitaba ver algo de luz al final del túnel en el que andaba metido. En ese mismo que atraviesa también el Málaga y en el que ayer se vio más atrapado. Los granotas cierran la primera vuelta asomando la cabecita mientas que a los de Schuster se les puede hacer muy dura la cuesta de enero.
Y eso que empezó asustando el Málaga. Camacho se sacó un buen cabezazo al poco de empezar que se marchó por poco. Pero el Levante buscaba hacer daño con balones largos. Ivanschitz se encontró un rechazo de Willy y Barral no acertó luego a puerta vacía cuando sólo tenía que empujarla. Pero poco después no falló. Ivanschitz se la puso en la cabeza a la salida de un córner y su giro de cuello bastó para mandarla a la red. Espoleados por el gol se vinieron arriba los granotas y Caballero tuvo que aparecer para despejar un chutazo de Nikos desde fuera del área. Igual que en el otro lado Keylor se vio obligado a meter los puños en un par de llegadas andaluzas. Santa Cruz, tal y como planeó Schuster, hacía daño bajando balones pero los posteriores lanzamientos lejanos y/o centros al área de sus compañeros no terminaban de ser fructíferos.
Y volvió a arrancar el Málaga con ganas tras el paso por los vestuarios. Llevando peligro, sacando entre Vyntra y Juanfran bajo los palos un balón franco de Santa Cruz. Ordenada por Caparrós, por motu propio de los jugadores o quizá por una mezcla de las dos, el Levante pegó su clásica ‘reculada’ y se instaló en su área a verlas venir y a vivir de los fallos rivales y alguna contra que se encontraran. Y así fueron probando Eliseu, Camacho, Portillo, Duda... pero siempre encontrándose con Keylor Navas. Siempre que iban a puerta claro. Las que no, no le hicieron falta al costaricense que volvió a encontrar la inspiración que tantos puntos dio a su equipo en el arranque de temporada. Y si el tico no llegaba ahí estaban sus zagueros para ayudarle.
Calentito. El partido fue subiendo de temperatura pero la calentura no le llegó al Málaga para empatar y sí al Levante para amarrar un tesoro que le hará afrontar la segunda vuelta con otras ilusiones (aunque lo primero que le viene es el dentista domicilio). Los de Schuster siguen todavía lejos del peligro pero aquí está demostrado que nadie puede dormirse en los laureles por que cuando menos te lo esperas le estás viendo las orejitas al lobo del descenso.