NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Real Sociedad - Athletic

Derbi del optimismo en Anoeta

El fútbol vasco está de fiesta: gran pulso de Champions (20:00, Canal+ 1). La Real tiene mayor pegada, con Griezmann y Vela. El Athletic, más físico y mejor sistema defensivo.

Derbi del optimismo en Anoeta

El fútbol vasco está de enhorabuena. En enero de hace siete años, Real y Athletic se jugaron el bigote en Anoeta por no bajar. Se quitaban el balón de encima y guardaban el sitio. Dos goles de Iraola como pivote dieron una estocada a los donostiarras, que pasaron por Segunda para reinventarse. ¡Y de qué manera! El público guipuzcoano ha conocido la Champions y el de San Mamés quiere recuperar el soniquete mágico de la máxima competición 16 años después.

REINA LA ALEGRÍA. Agirretxe y Susaeta posan con Euskadi en Lezama, donde jugaron juntos.
Ampliar
REINA LA ALEGRÍA. Agirretxe y Susaeta posan con Euskadi en Lezama, donde jugaron juntos.PAULINO ORIBE

Ambos equipos llegan lanzados al derbi del optimismo gracias al saber hacer y la discreción de dos técnicos de la casa, Arrasate y Valverde. El principiante se asoma con cuatro victorias seguidas. Txingurri, que no ha vencido en Anoeta ni de jugador, con 13 puntos de 15. La Real tiene mayor pegada, con Griezmann y Vela. El Athletic, más físico y mejor sistema defensivo.

El pronóstico es incierto. Lo único que se sabe es que, pase lo que pase, los rojiblancos seguirán cuartos. La duda es con qué ventaja. Si vencen, se irán a siete de renta y un calendario favorable. Muchísimo botín. La presión es para los locales, que han aireado hace tiempo su superioridad.

Poderosos. Dicho está, este deporte va a la velocidad del rayo. Hace dos años, el Athletic jugó dos finales y se comía el mundo con Bielsa. Perdió a sus campeones del mundo y se vaticinó bienio donostiarra. Los rojiblancos, a lomos de Iturraspe, Rico, Susaeta y Muniain, son ahora duros de pelar. La Real no tiene para inventar a Illarramendi, pero sí a Rubén Pardo y al eterno Xabi Prieto, que jugará con molestias. Es el derbi del siglo, un placer. Y sin malos rollos.