ELCHE 0 - MÁLAGA 1
Camacho y Duda vuelven a ganar fuera tras nueve meses
El centrocampista marcó de cabeza en el minuto 6 tras una gran falta botada por Duda. El equipo de Schuster se queda en media tabla y el de Escribá no consigue despegar.
El Málaga volvió a ganar fuera de casa nueve meses después. Lo hizo sufriendo hasta el final. Y eso que se dieron todos los condicionantes para haberlo hecho con bastante más holgura. Un despiste de la defensa franjiverde nada más comenzar le puso el partido cuesta abajo con el gol de Camacho. Y a partir de ahí se atrincheró atrás. Parecía difícil que aguantaran 85 minutos sin apenas pisar el campo contrario. Pero cuando más apretaba el Elche, se le apareció un ángel al Málaga, o mejor dicho un Damián, que se autoexpulsó y con esa acción condenó a su propio equipo a un castigo mucho mayor que el que el propio Málaga habría soñado hacer a su rival en toda la noche. A partir de ahí fue otro partido.
Duda fue el hombre del encuentro. Ya no tiene la velocidad y el desborde de hace años. Pero su guante izquierdo sigue intacto. Y los años le hacen jugar mejor sin tener que correr tanto como antes. A los cinco minutos, una falta innecesaria de Damián (aquí comenzó el sainete del uruguayo), la convirtió en caramelo para Camacho, que peinó de cabeza para ponerla lejos del alcance de Toño.
La cosa se ponía negra para el Elche que se le presentaba un partido como menos le gusta: teniendo que crear en ataque estático. Los franjiverdes tenían la posesión pero no fue hasta el final de la primera parte cuando creó la mejor ocasión. Gran maniobra de Boakye y Coro que falla ante Willy.
El segundo acto comenzó de la misma forma y el empate estaba a punto de caer como fruta madura. Pero entonces llegó el calentón de Damián y la expulsión que lo cambió todo. En ese momento, al Elche se le amontonó el trabajo. La primera parte del mismo la resolvió bien. Entre Toño y la defensa se las apañaron para desbaratar las muchas ocasiones que tuvo el Málaga a la contra. Duda empezaba a sentar cátedra pero sus compañeros no acababan de sentenciar. Pero la última intentona en busca del empate no tuvo éxito pese a que Cristian y Aarón insuflaron aire fresco.