Osasuna - Real Madrid
Los jugadores de Osasuna se quejan de los elevados precios
Ayer sólo se habían vendido 500 entradas. Arribas: “Yo las pondría baratas para que el campo se llenara”. Andrés: “Hay que encontrar un equilibrio en el precio”.
Antes de que diera comienzo la actual temporada el presidente de Osasuna, Miguel Archanco, anunciaba que los días del club, que obligan a los socios a pasar por taquilla, dejarían de ser en los partidos ante el Real Madrid y Barcelona, como venía siendo habitual. Los ‘medios días’ del club pasaban a ser ante Athletic de Bilbao y Real Sociedad. En principio la medida resultaba comprensible y se aceptó.
La sorpresa llegó ante la visita del Barcelona. Los precios de las entradas para los no socios eran desorbitados. Para el partido de mañana ante el Real Madrid, las premisas a seguir han sido las mismas, las entradas para los no abonados oscilan entre los 115 euros la más asequible, hasta los 135 de la más cara. Los elevados precios impedirán que el estadio pamplonés se llene. A última hora de ayer no se habían vendido ni 500 entradas y desde las oficinas del club aseguraban que el movimiento de aficionados acercándose a comprar entradas estaba siendo muy escaso.
Polémica. El martes, en la rueda de prensa que ofreció Miguel Archanco dijo de manera tajante: “El que quiera ver al Madrid, que pague”. De igual modo el directivo Txuma Peralta, cuando el Barcelona visitó El Sadar, comentó: “Estos partidos son para hacer caja”.
Algunos jugadores rojillos están muy molestos con el precio de las entradas que repercute en el poco apoyo en el estadio. Arribas manifestó: “Yo también tengo que comprar alguna entrada a ese precio y creo que es desorbitado. El año pasado las pusieron más baratas y los abonados se quejaron. También hay que entender al que paga su abono para todo el año. Yo ahí tampoco entro, pero yo las pondría baratas para que el campo se llenase y nos animase todo el mundo”.
Andrés Fernández, por su parte, comentaba: “Es un tema bastante complejo porque los no socios quieren las entradas más baratas y los socios las quieren así. Es complicado. El club lo que quiere es que haya socios desde el inicio de temporada. Lo importante es encontrar un equilibrio”.
No cabe duda de que los jugadores preferirían ver un estadio lleno con una afición entregada convirtiendo el feudo rojillo en una olla a presión. Sin embargo, debido al coste de las localidades, esto no se cumplirá y el número de espectadores podrían rondar los 15.000, cuando el estadio tiene capacidad para 19.900.
Incluso el expresidente de Osasuna, Patxi Izco, en declaraciones realizadas a la Cope, se mostró en desacuerdo con la política de la actual directiva: “Ha tomado unas medidas con las que yo no estoy de acuerdo, pero los que mandan son otros. Yo creo que no han acertado, aunque el fútbol es un espectáculo en el que los artistas cobran mucho y el espectáculo hay que pagarlo”.