Los jugadores toman el mando
Tata Martino hace caso a las últimas exigencias de la plantilla
El entrenador del Barcelona seguirá gobernando, pero retoca el plan de trabajo. El técnico argentino se apoya y echa mano del equipo de trabajo que trajo Tito Vilanova.
Gerardo Martino llegó a Barcelona sabiendo donde se metía, pero el tiempo le está demostrando que la fiera a domar no es tan dócil como a él le contaron. Buen canalizador de información, el entrenador azulgrana ha ido captando el mensaje de sus futbolistas, desconcertados por los métodos de entrenamiento y las pautas de trabajo a seguir en el día a día. Por ese motivo, el Tata ha decidido variar su sistema de preparación.
Pese a que él seguirá gobernando, continuará fiel a un deseo que tuvo ya en verano: no tocar nada de lo que ya estuviese en marcha. Desde un primer momento quiso a todo el equipo de Tito Vilanova a su lado y ahora seguirá echando mano de ellos. De esta manera, y tras varias conversaciones con pesos pesados de la plantilla, la preparación física correrá a cargo de Aureli Altimira y el resto del equipo de colaboradores, mientras que Martino deberá insistir en la parcela táctica y de posicionamiento.
La reflexión. “El entrenador supo adaptarse a los métodos del Barcelona y apoyarse en la gente que ya había como Edu Pons, Altamira, Paco Seiru-lo... Mucha pelota, rondos, pases para coger la chispa necesaria. Es de agradecer que haya hecho el gesto y cambiase sus costumbres. El míster se adaptó bien a la metodología. En el tema táctico él es quién nos guía”, explicó ayer Piqué, uno de los futbolistas más influyentes de la plantilla azulgrana en todos los aspectos.
Las edades comienzan a agrietar el vestuario
Uno de los grandes problemas que se está encontrando Martino es el de las grietas surgidas en el día a día derivadas del desfase de edad que hay entre los componentes de la plantilla. Las relaciones son cada vez más tensas. Tello y Montoya no estuvieron finos el pasado lunes. El extremo aseguró que se buscaría la vida si no contaba con más minutos. El lateral fue más comedido. Eso sí, ambos tuvieron reprimenda, tanto a nivel individual como colectivo por parte de los veteranos del vestuario azulgrana. Piqué les “abrió las puertas” si no estaban contentos, mientras que Iniesta, en la gala de la LFP celebrada la noche del lunes en Madrid, rebatió las palabras de sus compañeros. “Este equipo se caracterizó por la solidaridad”. Martino deberá pensar en ello, sabiendo quién irá a Cartagena y quién no. Son el presente y el futuro del club. Mientras, Thiago se lo mira todo desde Múnich.