CELTA 0 - RAYO 2
Por fin el fútbol premia al Rayo
El equipo de Paco fue muy superior al Celta en el primer tiempo y aguantó la respuesta gallega en el segundo. Jonathan Viera y Larrivey firmaron los goles.
El estadio de Balaídos es el mejor escenario posible para los visitantes. El Celta se está comportan esta temporada como un perfecto anfitrión y siempre permite a sus adversarios irse de Vigo con una alegría. Hasta la fecha, siete partidos, tres empates y cuatro derrotas. Esta noche, el Rayo venció con total merecimiento, cimentando su victoria en un inmenso centro del campo y aprovechando la calidad de sus atacantes. También se emplearon con contundencia en defensa, ante un equipo nulo en ataque como local. La afición celeste no ha visto un gol de su equipo desde agosto. Y ya ha llovido mucho desde entonces...
El encuentro comenzó eléctrico, tal y como indicaba el guión. Ambos equipos se mostraron fieles a sus estilos, aunque con un matiz bastante importante. El Rayo tenía las ideas muy claras, el Celta era un mar de dudas al que le pesaba la ansiedad tras tanto fracaso ante su público.
No habían pasado ni cinco minutos y ambos equipos ya habían amenazado a su rival. Tras un pequeño respiro, a los 24 minutos llegó la acción del partido. Trashorras estaba rodeado por tres jugadores vigueses que ejercían sobre él una presión asfixiante. El lucense actuó entonces de ilusionista y le entregó el balón a Tito con un recurso de mago. El lateral centró sin oposición y Viera no perdonó ante Yoel.
El equipo de Luis Enrique se quedó noqueado y los rayistas pudieron sentenciar antes del descanso. No lo hicieron y el Celta seguía vivo, aunque las ideas continuaban sin aparecer. Rafinha dio algo de oxígeno a los celestes, pero en el intercambio de golpes, el banquillo madrileño sentenció. Larrivey cabeceó con fuerza un magnífico centro de Embarba y finiquitó el encuentro. El Rayo no sólo deja de ser colista, sino que hoy se despierta fuera de la zona de descenso.