El Zhar y Baba destrozan a un voluntarioso Espanyol

Parece que la nevera se ha quedado pequeña para Muñiz Fernández. A la próxima debería ir, más bien, al congelador. Aunque se hablará más de lo de Undiano en el Clásico, su colega fue determinante también en Orriols. Una pena para un partido vistoso de por sí. Como igual de helado se quedó el Espanyol con dos goles granotas en apenas dos minutos. Demasiada losa y nada merecida. Pero, recurriendo al tópico, el fútbol es así y con un partido tan de cara el Levante no volvió a dejar escapar los puntos como hiciera contra el Madrid.

A los cinco minutos la grada ya había pedido un penalti cuando El Zhar fue derribado, pero fuera del área. Muñiz, de todas formas, no pitó ni falta. Y de la misma manera se volvió a equivocar al señalar los once metros cuando Víctor Sánchez derribó de nuevo al marroquí cuando encaraba portería pero todavía no pisaba el área de Casilla. El propio Nabil transformó la pena máxima. En plena crecida granota el omnipresente marroquí puso un balón en la cabeza de Baba que giro el cuello a la perfección para mandarlo a la red. Mucho se acordarán los pericos, y concretamente, Stuani de las dos buenas ocasiones que antes de esto se fueron al limbo. Un remate franco de cabeza primero en el que la bola se marchó lamiendo el palo de Keylor. Y un disparo que se le fue arriba al charrúa dentro del área tras una dejada de Sergio García. Tras el mazazo de los dos tantos, aún en la primera mitad, el uruguayo dispuso de otros dos cabezazos, y Víctor Sánchez probó a Navas desde lejos a lo que el tico respondió sin problemas. Eso sí, los focos volvieron a señalar al colegiado con el sospechoso brazo de David Navarro por medio, primero con Sergio García y casi al final con David López. Ambas quedaron en nada.

El Levante se encontró con el partido ideal. El que más trabaja durante la semana y donde se maneja a la perfección. Prueba de ello fue otra conexión de la sociedad Baba-El Zhar que significó un golazo de este último por toda la escuadra. A partir de ahí, el Espanyol siguió intentándolo y se encontró con las paradas de turno de un Keylor Navas que sigue provocando ovaciones. Los granotas ganan por fin en casa y se acercan a Europa adelantando a un Espanyol que ya mira al derbi en el horizonte.