Real Madrid
El Real Madrid 68-69 conserva el gran récord de nueve victorias
Barcelona y Atlético tuvieron el sábado la oportunidad de igualar el récord de nueve victorias seguidas en un arranque de Liga logrado por el Madrid de los 'Ye-Yés'.
El Madrid sigue manteniendo el récord de nueve victorias seguidas en un arranque de Liga, logrado por los Yé-Yés en la 1968-69. Barça y Atlético amenazaban con igualar ese inicio, pero ambos pincharon y el récord quedó en pie. Y ya van 45 años...
Nadie ha podido igualar el comienzo de aquel Madrid, entrenado por Miguel Muñoz, con todos españoles y cuya base era la del equipo que ganó la Sexta Copa de Europa en 1966. Arrancó intratable pese al difícil calendario. Venció al Español, que fue uno de los rivales que más cara le plantó los dos años anteriores, ganó en casa de Athletic y Valencia y las últimas victorias las logró en el Manzanares ante el Atlético y contra el Barça en el Bernabéu. Y lo hizo a lomos de un Amancio que atravesaba un espectacular momento de forma.
El Brujo marcó diez goles en esos primeros nueve encuentros (en la imagen, celebra el tanto que le hizo al Atlético) y acabó Pichichi, con 14 tantos, (igualado con el rojiblanco Gárate). El brillante arranque del gallego, incluso, hizo que la FIFA le nombrara el mejor interior derecho del mundo y le llamara para formar parte de la selección mundial que se midió a Brasil en Maracaná el 7 de noviembre de 1968. El Madrid se agarró a Amancio y en nueve jornadas, los blancos marcaron 21 goles y encajaron ocho. En el décimo partido, se truncó la racha de victorias. Los de Miguel Muñoz empataron a cero ante el Pontevedra del Hai que roelo en un Pasarón embarrado...
Al término de la primera vuelta, el Madrid había sumado 27 puntos de 30 posibles. Al final, ganó la Liga (la 14ª y la octava en nueve años) con 47 puntos. Sólo Las Palmas le opuso algo de resistencia (segundo, con 38 puntos). Estuvo 27 jornadas invicto. El Elche, en la 28ª, fue el único capaz de ganar a un Madrid que ya tenía el título en el bolsillo (1-0 con un gol de De Felipe en propia puerta).