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CÓRDOBA 1 - SABADELL 0

Sáizar regala los tres puntos a un Córdoba con un hombre menos

El guardameta califal evitó goles cantados de un Sabadell que mereció más con un jugador más durante toda la segunda parte. Marcó Caballero de penalti.

CórdobaActualizado a
Los jugadores del Córdoba celebran el gol que les dio el triunfo.
Juan Obrero Larrea

El Córdoba se reencontró con la victoria tras dos semanas perdiendo, en un partido agónico para los locales, que pasaron de tener la situación bajo control en el primer tiempo, a pedir la hora y celebrar el triunfo de forma heroica al final. Y es que los blanquiverdes jugaron toda la segunda parte con un jugador menos por la expulsión de Pedro, lo que provocó que el Sabadell encerrara a los andaluces y convirtiera en héroe local al portero Mikel Sáizar. Él solito regaló tres puntos a su equipo.

El Córdoba llevó las riendas del partido en la primera mitad. Con un fútbol fluido en muchos momentos y una mejora en la actitud con respecto a semanas anteriores, los blanquiverdes dominaron el choque y se adelantaron en el marcador con un gol de Caballero, merced a un penalti claro cometido sobre Pedro. El madrileño no dudó y adelantó a los suyos. El gol, sin embargo, no amedrentó al Sabadell, que a partir de ahí dispuso de dos claras ocasiones para empatar. Tamudo obligó a Sáizar a emplearse a fondo y poco después, el propio delantero catalán estrelló un remate en el larguero.

El Córdoba, que tenia el encuentro controlado, se dio cuenta de que tendría mucho que pelear si quería quedarse con los tres puntos. Y más, cuando al borde del descanso se quedaba con un jugador menos tras la expulsión de Pedro por doble amarilla. El Arcángel estalló contra el colegiado al entender que no midió con el mismo rasero a los dos equipos. Bronca y descanso.
Tras el paso por los vestuarios, el Sabadell salió decidido a buscar el empate. Con uno menos, el equipo de Villa casi renunció al ataque y lo fió todo a una buena contra.

El cuadro catalán encerró a los locales por momentos y la grada se preparó para sufrir. El acoso fue a más conforme pasaban los minutos y dio la sensación de que el Córdoba lo fiaba todo al momento dulce de su portero. Sáizar salvó el empate en varias ocasiones, sobre todo en un remate a bocajarro que ya se veía dentro. En los minutos finales Strahman y López Silva, en sendas contras pudieron sentenciar pero se encontraron con Nauzet, lo que prolongó el sufrimiento. Al final, victoria local ante un Sabadell que mereció más, pero que perdonó en exceso.