CASTILLA 0 - ALCORCÓN 1
El Alcorcón toma Valdebebas
Un gol de Ángel en el minuto 16 dio la victoria al Alcorcón, que suma su segundo triunfo en dos jornadas. El Castilla no ha logrado marcar en los últimos cinco partidos.
Definitivamente, el Castilla necesita fichar un nueve como el comer. El equipo juega, llega, por un lado y por otro, pero al final le falta maldad en el área. Los atacantes rinden, no es cuestión de señalar, pero ninguno tiene el instinto asesino que tenían, por ejemplo, Jesé, Joselu o Morata. El mercado sigue abierto y uno de los males del equipo aún tiene solución. Ayer, el Castilla, que realmente mereció más, volvió a quedarse a cero y ya van cinco partidos.
Mucho más hecho está el Alcorcón, que apenas ha retocado piezas y que sabe a lo que juega. Rocoso con tres jugadores en el centro del campo y peligroso con Sales y Juli en los extremos. Tras varios centros laterales con los que esperaba buscar las cosquillas del Castilla (así lo destrozó hace ocho meses en Santo Domingo), el gol llegó en una segunda jugada.
La zaga blanca no acertó a despejar con contundencia un balón al área y le llegó a Ángel, en la frontal, que soltó un zurdazo raso y ajustado al palo que Pacheco apenas vio.
Para entonces sumaba más acercamientos el Castilla, incluidos dos buenos tiros de Jaime y Lucas, pero mandaba la puntería amarilla. Borja, en dos ocasiones, buscó el empate, pero Dani se lo impidió. El filial acumulaba llegadas, sobre todo desde las bandas gracias a Llorente y Casado, pero faltaba finalizar.
Tras el descanso, tardó en afinarse el Castilla y fue el Alcorcón quien amenazó con más peligro. Nagore rozó el 0-2 desde fuera del área y Sales probó también desde lejos. Toril empezó a mover el banquillo y dio entrada primero a Sobrino, que al minuto habilitó a Lucas con un pase entre líneas. El extremo, solo ante Dani, perdonó la igualada.
Luego entraron Cristian Gomez, debutante con apenas un día en Madrid, y Benavente, una de las perlas de La Fábrica, para darle chispa al centro del campo. Tampoco funcionó, porque para entonces el Alcorcón ya estaba bien armado atrás, esperando la contra definitiva. No la tuvo. Tampoco le hizo falta. Con la seguridad de Dani en el área y el paradón a bocajarro que hizo en el 92’ le fue suficiente para frenar a un Castilla que al final se ganó el empate.
Casualidad o no, el Alcorcón ha ganado sus dos partidos 1-0 y el Castilla ha perdido los dos así. Al filial le falta pegada, aún lo puede remediar...